A Marc Gasol le dolió mucho que su entrenador, David Fizdale, le dejase en el banquillo durante la totalidad del último cuarto del Brooklyn Nets-Memphis Grizzlies. Llegó una nueva derrota para su equipo (88-98, van ocho consecutivas), que es el peor de la NBA en estos momentos. Y la mala racha no entiende de jerarquías: Gasol, a pesar de ser el máximo anotador de los suyos (18 puntos), fue 'castigado' con la suplencia a la hora de la verdad. Cosa que no sentó nada bien al capitán de los Grizzlies.

"Te lo tomas de forma personal. Obviamente es algo que te frustra y yo lo hice. Me enfadé y empiezas a pensar la razón", comentó ante los periodistas tras el encuentro. Poco a poco, sus palabras fueron adquiriendo mayor dureza. "No sé el porqué (de la suplencia). Es la primera vez para mí, créeme, y no me ha gustado nada. Estoy más enfadado de lo que puedo mostrar" ("No es nada personal. Sólo quería ver si el grupo que estaba en la cancha podía mantener el ritmo, pero no funcionó", comentó su entrenador al respecto en sala de prensa).

Entonces, llegó la sentencia más rotunda de Marc: "Si no estoy en la cancha es que no soy valorado. Estoy seguro de que el cuerpo técnico sabía que es lo que más me iba a doler. No sé si hay algo más que decir. Soy más un tipo de acción. No creo en las palabras. Veré lo que hace la gente y actuaré en consecuencia".

Gasol también aseguró que a Mike Conley, otro de los líderes de Memphis y su jugador mejor pagado, no le habrían hecho lo mismo que a él. Aun así, no quiso perder la calma. Ni con sus palabras ni con su gestión del caso. "Tengo que ser un líder y dar ejemplo a los jóvenes. Ahora que estoy en esta situación, tengo que enseñarles cómo reaccionar. Estoy frustrado, pero para el beneficio del equipo tengo que mostrar liderazgo y seguir haciendo mi trabajo", sentenció.

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