En el deporte, y en la vida, hay días en los que todo sale bien: se marcan los goles imposibles, se meten esos triples que golpean tres veces en el aro…. Sin embargo, hay otras jornadas, más largas por lo que acontece, en las que todo se pone del revés. Como puede confirmar el Atlético de Madrid, que ha pasado de anotar ocho goles en tres partidos a no ver puerta en los dos últimos, ante Celta (0-0) y Sevilla (0-0). Y, precisamente, esa sequía llega cuando el conjunto del Cholo Simeone más necesita tener ajustada la mirilla, a pocos días de volver a recibir a los vigueses en el Calderón para disputar la vuelta de los cuartos de final de Copa del Rey y de visitar el Camp Nou el sábado, donde se jugará buena parte de sus opciones en la Liga.
“Aquí es muy difícil marcar, y además si lo hago yo...”. Esas palabras de Filipe Luis el pasado fin de semana, en la victoria contra Las Palmas, ejemplifican en buena parte el problema por el que atraviesa el conjunto del Cholo Simeone. Porque sí, es verdad que hasta 14 hombres han anotado un tanto esta temporada, pero también es cierto que el Atlético de Madrid es el equipo que menos goles a favor lleva de entre los tres primeros clasificados en la Liga (30). Esa es la cruz de un equipo que puede presumir de tener la mejor defensa de Europa (tan solo ocho dianas concedidas, menos que cualquier otra escuadra en todo el continente), pero al que le cuesta horrores abrir el marcador cada partido.
Ante semejante problema, se podría pensar que el Atlético necesita delanteros. Pero no es así. Contra el Sevilla, y hablando de '9' puros, tuvieron su oportunidad Vietto y Jackson Martínez, los fichajes estrella de este verano (55 milllones en conjunto). Eso sí, ninguno de los dos consiguió batir a Sergio Rico. Entre ambos, esta temporada, llevan seis goles. Y tampoco lo pudieron hacer Griezmann (dos partidos de sequía, pero 18 tantos en total esta temporada -pocas culpas se le pueden echar-) ni Correa, que saltó al campo a 10 minutos del final.
Entonces, ¿cuál es el problema? En principio, la falta de acierto rojiblanca podría ser una casualidad o una mala racha. Y la otra teoría es que, a pesar de que el Atlético genera ocasiones, no son del todo claras. Y ahí, quizás, es donde está fallando el equipo en estos últimos partidos. Koke, Gabi, Saúl y Augusto -los cuatro titulares ante el Sevilla- mueven al equipo, dan fluidez al juego y cortan la salida de balón del rival, pero, en ocasiones, no son capaces de filtrar el balón, como sí podría hacer un mediapunta al uso. O como Griezmann y Carrasco intentan cuando se lo permiten las circunstancias del juego.
En esa tesitura afrontará el Atlético de Madrid su semana decisiva, compartiendo coliderato -con un partido menos- con el Barcelona (48 puntos) y con la vuelta de cuartos de final de la Copa del Rey contra el Celta de por medio. Eso sí, el camino es el correcto a pesar de la falta de acierto de los últimos partidos: “Lo importante es que generamos ocasiones, y eso lo estamos haciendo”. Palabra de Simeone.