10 minutos antes de adelantar al Real Madrid en el Vicente Calderón, Cristiano Ronaldo protagonizó una ocasión clara de gol que dio lugar a la duda. Un remate de cabeza del ariete luso a centro de Gareth Bale acabó en las manos de Oblak tras una gran intervención. Tan ajustada que Cristiano protestó al árbitro Fernández Borbalán, considerando que el balón había traspasado la línea de gol.
El colegiado no lo vio así y el partido continuó 0-0 hasta el posterior 0-1 de Cristiano en el 23. Fernández Borbalán consideró que el portero esloveno del Atlético de Madrid despejó la pelota antes de que entrase en su totalidad en la meta rojiblanca.
Resultó algo anecdótico, pero ahí quedó cierta polémica, con Cristiano llevándose las manos a la cabeza y protestando la decisión del árbitro de forma visible. Sin embargo, el disgusto se le pasó rápido al abrir el marcador del derbi.