La Real Sociedad vuelve a entrar momentáneamente en puestos europeos, a la espera del partido entre Eibar y Athletic del lunes, tras ganar con un gran fútbol a un Deportivo de La Coruña que cayó en Anoeta con un gol de Willian José en el primer tiempo (1-0).





Los donostiarras entraron eléctricos al partido, sin dar opción a su rival, y tuvieran una clara ocasión para haber hecho el primer gol a los doce segundos en un cabezazo de Prieto a pase de Oyarzábal que el capitán erró por centímetros.





Nuevamente Prieto y también Zaldua volvieron a rondar el gol, ante un conjunto gallego que parecía noqueado con las tempranas y claras oportunidades de los vascos, mientras que su técnico, Pepe Mel, trataba de corregir sobre la marcha los errores de su equipo.





Amainó la tormenta blanquiazul a medida que transcurría el primer tiempo, los gallegos cogieron el tono del encuentro y comenzaron a ofrecer la imagen que se esperaba de un Deportivo abonado a los buenos resultados en San Sebastián desde 2011.





El plan de Mel se vino abajo, sin embargo, en el minuto 27 cuando el defensa local Yuri, en estado de gracia esta temporada, sirvió un balón a Willian José que, de espectacular testarazo, hizo inútil la estirada del guardameta Germán Darío Lux para lograr así el brasileño su undécimo tanto de la temporada.





El cancerbero argentino estuvo a punto de encajar el segundo en sendos obuses desde fuera del área de Iñigo Martínez y Oyárzabal que no encontraron el objetivo del gol por muy poco, en los que fueron los mejores minutos de la Real.





La segunda mitad empezó igual de bien para los vascos, que disfrutaron de una triple ocasión de Willian José, el máximo goleador de cabeza de toda la Liga, pero en esta ocasión Lux estuvo fino y le ganó la batalla.



El Dépor estaba contra las cuerdas, no llegaba a los dominios de Rulli y la Real ocupaba constantemente el territorio rival con solvencia aunque con escasas oportunidades claras para subir el 2-0 al marcador.





La llegada más diáfana de los coruñeses en esta segunda mitad, en la que no tiraron con peligro sobre los tres palos de Rulli, llegaría en el tramo final del encuentro con una subida de Sidnei, centro de Andone y un cabezazo intencionado del brasileño que se marchó fuera.





Oyrzábal la tuvo también antes de la conclusión y Sergio Canales disparó al palo también en las postrimerías del choque, por lo que el marcador quedó inalterable y escaso para los méritos guipuzcoanos.



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