La chica que recibió un bolazo en la Ryder Cup asegura que pudo perder la vida

La pasada semana tuvo lugar la Ryder Cup, donde Europa acabó imponiéndose a Estados Unidos. A ella acudieron numerosos aficionados al golf que disfrutaron con este deporte. Corine Remande no tuvo una buena experiencia ya que de un bolazo acabó perdiendo la visión de un ojo. 

La chica francesa tuvo la mala suerte que la bola impactó de lleno en su ojo. Había acudido con su marido al campo para disfrutar de la Ryder Cup. ''No sentí que la bola hubiera golpeado mi ojo y luego vi que la sangre comenzaba a derramarse.  

Ahora, tras una entrevista a la BBC Sport, la chica asegura que podría haber muerto tras el suceso ocurrido. "Si la pelota me hubiese golpeado en un lado de su cabeza en vez del ojo, ahora mismo no podría estar hablando contigo", le dijo al entrevistador del medio inglés. 

Tras perder la visión del ojo, la afectada se plantea denunciar a la organización de la Ryder. "Espero que este accidente mejore la seguridad del público. No fue una imprudencia mía, por lo que creo que hay una responsabilidad de los organizadores". 

"El médico le dijo a mi marido que fue una explosión muy grande en mi ojo y que ahora no podré ver a través de él. Me será difícil vivir con uno solo. Me gusta caminar, hacer deporte, ir al gimnasio y jugar al golf", dijo.

Corine Remande cree que los comisarios de la Ryder Cup deberían haber avisado que tuviesen cuidado ya que venía una bola que podría impactar en los espectadores. Además, asegura que hubo una falta de advertencias de seguridad y que nadie se preocupo por ella ni la visitaron en el hospital. 

Tras el suceso, Koepka, que fue el golfista que golpeó la bola que impactó en el ojo de Corine, se mostró desolado al saber lo ocurrido. "Fue probablemente uno de los peores días de mi vida", dijo. "Tengo el corazón roto. Mi estómago se hundió. Es triste y estoy realmente desgarrado por eso".