La inesperada retirada de Nico Rosberg ha dado alas a Lewis Hamilton en Mercedes. Líder ya indiscutible de la mejor escudería de la Fórmula 1, el británico ha aprovechado su estatus para mandar un mensaje claro a sus jefes: el piloto que le acompañe en 2017 será una decisión que deberá ser consultada con él.
Aunque Mercedes ha anunciado que no tomará una decisión antes de enero, el nombre de Fernando Alonso ya está sobre la mesa. Y es precisamente ese tipo de 'gallos' del paddock con los que no quiere lidiar Hamilton la próxima temporada. Especialmente después de la tensa relación que vivieron cuando coincidieron en 2007 en McLaren.
Toto Wolff anunció en su día que le gustaría contar con Alonso en Mercedes si se daba la ocasión, por lo que la renuncia de Rosberg abre una puerta al español. Sin embargo, no es la opción preferencial de la escuderia. Valtteri Bottas, con un perfil más joven y con capacidad de progresión, es el primero en las casas de apuestas.
En cualquier caso, la opción de que Alonso aterrice en Mercedes aterra hasta tal punto a Hamilton que ha amenazado a la escudería incluso con vetar su hipotético fichaje. "Básicamente, cuando ellos [Mercedes] hayan reducido la lista a cinco aspirantes, o los que sean, tendrán que discutirlo conmigo", aseguró el piloto a la británica Channel 4.
La rivalidad con Alonso aún escuece
"Mercedes puede fichar al piloto que quiera; traer a Sebastian [Vettel], Fernando [Alonso] o quien sea. Conduje contra Fernando en mi primer año [2007] y le gané, así que no me preocupa. Soy feliz de conducir contra cualquiera de ellos. Pero en términos de qué es lo mejor para el equipo, probablemente no sea la mejor idea", reconocía el británico.
No obstante, Hamilton no cree que sea él quien determine a su próximo compañero en Mercedes. Eso sí, espera que no complique el ambiente en la escudería. "Yo no he de determinar quién debe ser, pero es importante a quien tengamos en el segundo monoplaza, importante para la moral del equipo. Ya sabemos que en otros equipos puede tener un efecto tóxico la extrema rivalidad entre los pilotos", resumió.
Por último, destacó -sin nombrarla explícitamente- su mala experiencia con Alonso en McLaren. "He tenido experiencias con ciertas personas en el pasado por las que aconsejaría encarecidamente no tener en un equipo ese escenario". De momento, la pelota está en el tejado de Mercedes.