Misano

Confiaba en que Misano fuera un circuito propicio para cambiar la dinámica tras el paso hacia delante mostrado hace una semana en Silverstone. “En cualquier momento podemos estar de nuevo en lo más alto del podio”, aseguró el pasado jueves en la conferencia de prensa previa del GP de San Marino, donde Jorge Lorenzo llegó cargado de optimismo y dispuesto a recuperar la senda de la victoria. El primer paso ya lo ha dado al conseguir su tercera pole consecutiva en el trazado que se encuentra a sólo 13 kilómetros del Tavullia, el pueblo de su compañero de equipo, y convertirse en el recordman mundial de MotoGP tras deshacer el triple empate con Marc Márquez y Valentino Rossi al anotar su pole mundialista número 64.

El vigente campeón del mundo de MtoGP sólo necesitó tres giros para batir el récord de la pole de Misano (1:32.146), que estaba en su poder desde la pasada temporada, y desbancar a Marc Márquez de la cabeza de la clasificación. El recital no había hecho más que empezar porque Lorenzo todavía tenía guardado un as debajo de la manga después de que, en su segunda salida a pista, se encontrara con Márquez al final del pit lane. El piloto español del equipo Repsol Honda, que tomará la salida desde la cuarta posición, miró para atrás y vio que venía Lorenzo. Entonces se esperó un poco y, cuando ambos estaban prácticamente a la misma altura, fue el piloto de Yamaha el que gesticuló para que Márquez siguiera hacia delante para salir a la pista.

“Tanto Jorge como yo estábamos buscando el hueco. Él me ha dicho que tirara porque yo había salido primero, que es lo lógico. Había mucho tráfico y estaba Pol Espargaró y otros pilotos esperando. Me acuerdo de Pol porque hizo toda la vuelta detrás de mí. No he sido lo suficientemente listo para encontrar una vuelta sin tráfico. En cambio, Jorge y Valentino, sí lo han sido”, explicó el líder de la general de MotoGP.

Sin nadie que enturbiara su última vuelta, Lorenzo se lanzó de nuevo al ataque para fulminar su crono anterior e instaurar un nuevo récord de la pole en Misano (1:31.868), donde sumó la tercera de la temporada tras las conseguidas en Losail y Le Mans. “Ha sido la mejor vuelta de mi vida. Me la he jugado, me he arriesgado a una caída y he conseguido un gran tiempo sin caerme”, narró el piloto español de Yamaha.

Rossi, al que se le canceló la penúltima vuelta por exceder los límites de la pista, tuvo tiempo suficiente para lanzar un último ataque que le llevó hasta la segunda posición de la parrilla de salida y por delante de Maverick Viñales. “Pienso que Lorenzo buscará salir fuerte y escaparse, porque es lo que hace siempre cuando está en forma. Será fundamental salir bien y tratar de entorpecer a Jorge. De lo contrario, él tratará de escaparse”, aseguró Il Dottore, algo decepcionado por no conseguir la pole en su casa.

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