No están siendo los mejores días en la vida y en la carrera de Conor McGregor. El luchador irlandés perdió en su combate contra Dustin Poirier, la lucha que desnivelaba la rivaidad entre ambos y que suponía su segunda derrota frente a 'The Diamond', quien se ha convertido ahora en su archienemigo.
El resultado de la pelea entre McGregor y Poirier fue de lo más sorprendente, ya que cede ante su rival al fracturarse la tibia de forma escalofriante y el árbitro se ve obligado a intervenir cuando Dustin ya se había situado sobre el luchador irlandés para propinarle los golpes definitivos.
Los gritos de dolor retumbaron en todo el pabellón y 'The Notorious' terminó saliendo en camilla, ovacionado por sus seguidores que no daban crédito a lo que estaban viendo. De esta forma parecía concluir una rivalidad que, sin embargo, tendrá nuevas entregas en el futuro. Así lo pidió McGregor y así lo ha reconocido Dana White, presidente de la UFC.
Dustin Poirier, Dana White y Conor McGregor, en el pesaje de la UFC 264
Sin embargo, el mandamás de la compañía se encargó también de reprender al irlandés que, tras perder el combate y con la pierna hecha trizas, se dedicó a criticar a Dustin y a hablar de su pareja, algo que White no aprobó. Todavía con la derrota caliente, Conor se dedicó a calentar ese hipotético cuarto combate.
Los aficionados a la UFC ya dan palmas con lo que podría venirse entre ambos ya que, si McGregor consiguiera derrotar a su rival, seguramente se solicitaría un quinto combate para determinar quien es el vencedor de esta rivalidad que se extenderá durante años. De momento, el irlandés tendrá que estar muchos meses en el dique seco tras su fractura.
Sin embargo, esta no es la única mala noticia para él. Tras sus ataques realizados contra Poirier y después de recibir la reprimenda de Dana White, recibió la ira de Dustin, que no pasó por alto algunas de las críticas que había lanzado contra él antes del combate donde llegó a hablar incluso de muertes y de asesinatos para referirse a la resolución del combate entre ambos. A esa fiesta se unió su gran rival Khabib Nurmagomedov, ya retirado de la lucha y que fue su gran pesadilla en los últimos años de su carrera.
Mayweather apuesta contra McGregor
No obstante, una persona tan polémica y mediática como Conor McGregor tiene enemigos casi por todas partes. De hecho, con esta nueva derrota que ha derivado en lesión de gravedad, están saliendo todos, uno otras otro, para hacerle pagar todas sus facturas una otras otra.
El que ya ha recaudado gracias a su derrota frente a Dustin Poirier es Floyd Mayweather, con quien McGregor tuvo una rivalidad de disciplinas en la que el irlandés decidió pasarse al boxeo para pelear contra el púgil invicto, también con mal resultado para él. El como de Conor es que ha hecho ganar dinero Floyd.
Así lo ha mostrado el propio Mayweather a través de sus redes sociales donde ha publicado una de las apuestas que hizo para el combate entre McGregor y Poirier. El boxeador apostó 50.000 dólares por la derrota de Conor y, como perdió, su embolsó otros 35.000 más. En total, un botín y una ganancia de 85.000 dólares sin mover un dedo y todo gracias a esa lesión de su pierna que propició la victoria de Poirier sobre 'The Notorious'.
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