Son muchas las estrellas del deporte que no quieren mantener quieto su dinero en el banco y que apuestan por diferentes inversiones. Algunos optan por hacerlo de manera autónoma y otros acuden a expertos. Sin embargo, en este segundo caso no siempre está garantizada la seguridad. Es justo lo que han vivido varias estrellas del deporte estadounidense que confiaron en un agente y que ahora denuncian ante las autoridades por el desvío de prácticamente 10 millones de dólares.
El señalado en cuestión es Darryl M. Cohen, un experto con 25 años de experiencia que trabajaba para un banco de prestigio como Morgan Stanley. Los afectados, según la investigación de medios estadounidenses como The New York Times, van desde Chandler Parsons hasta Jrue Holiday, su esposa Lauren Holiday o el también jugador de la NBA Courtney Lee. No se descarta que en las próximas fechas salgan a la luz nuevos nombres de deportistas de élite, pues la denuncia de estos citados se ha producido para evitar nuevas presuntas estafas.
Morgan Stanley, que ha recibido muchas críticas por parte de estos clientes afectados, se ha desmarcado de cualquier actividad de Cohen. De hecho, portales especializados como AdvisorHub aseguran que fue despedido el pasado mes de marzo de 2021 tras algunos de sus comportamientos laborales como unas "transacciones no divulgadas o aprobadas por Morgan Stanley y el uso de una plataforma no aprobada para entablar comunicaciones inapropiadas con los clientes".
Cohen también ha sido suspendido por el FINRA, el órgano encargado de controlar este tipo de movimientos y sus actores habituales. La razón de su suspensión fue que cuando comenzó la investigación se negó a cooperar y, por lo tanto, obstaculizó la obtención de los datos que se estaban reclamando. La gran duda es saber a dónde han ido esos casi 10 millones de deportistas afectados que no saben qué se hizo con sus fondos.
10 millones desviados
Jrue Holiday y Lauren Holiday son dos de los principales afectados que se conocen. El jugador de la NBA y la exfutbolista, según datos de NYT, perdieron 2,3 millones de dólares. Cohen los obtuvo de sus cuentas y los desvió a "personas y entidades dudosas". Lo que debería ser una inversión que reportara beneficios se convirtió en la desaparición de un dinero que no han vuelto a ver.
El todavía jugador de baloncesto milita actualmente en Milwaukee Bucks. Sin embargo, su gran contrato lo firmó en 2017 por cinto temporadas con los Pelicans. En total iba a recibir 152 millones de dólares. Según datos de Forbes, tiene unas ganancias de 27,1 millones y en 2019 se coló como el número 76 en la lista de deportistas más ricos del año.
Su pareja, de la que se desconocen este tipo de datos, también es un nombre reconocido en el deporte estadounidense. En 2015 se proclamó campeona del mundo con la selección de fútbol y posteriormente colgó las botas para formar una familia y luchar contra un tumor del que tuvo que ser intervenida. Ambos se preguntan dónde están esos más de dos millones de dólares.
Movimientos sin consentir
Chandler Parsons es otro de los afectados. En su caso, el exjugador de la NBA vio cómo se empleaban cinco millones de dólares de sus cuentas para una inversión que no se sabe cuál es. El exjugador, en 2018, figuraba en el puesto 82 de la lista Forbes de deportistas con más dinero. La misma revista le asigna unas ganancias de 23,1 millones. Antes de retirarse en 2020 por un accidente de tráfico provocado por un conductor ebrio, había firmado un contrato con Hawks de unos 25 millones por temporada.
El último nombre que se conoce es el de otro jugador de la NBA como Courtney Lee. Actualmente se encuentra sin equipo y buscando los casi dos millones de dólares que Darryl M. Cohen habría estafado. Los movimientos en sus cuentas, según ha denunciado, se produjeron entre 2017 y 2019 sin su consentimiento. Además, también ha señalado que Cohen animó a invertir en fondos que no tienen ningún tipo de interés para el inversor en cuestión.
[Más información - Detienen a 16 exjugadores de la NBA por una trama de fraude al plan de salud de la liga]