El boxeo español se ha quedado en los últimos meses sin campeones europeos. No tiene que ver con malos resultados y sí con una buena razón: las miras son mundialistas. La última renuncia ha sido la de Kerman Lejarraga (Bilbao, 1992), que ha decidido abandonar su título de Europa superwélter en busca de objetivos más ambiciosos para su carrera deportiva.
Kerman sigue así los pasos de otros dos púgiles que en los últimos meses hicieron lo mismo. El cántabro Sergio García (Torrelavega, 1992) renunció en mayo de 2021 al mismo título que ahora poseía Kerman y que colgaba en su cintura desde septiembre de 2018. Ese gesto, para ir a Estados Unidos a pelear, abrió las puertas del boxeador vasco a combatir por el título en septiembre y derrotar a los puntos al francés Dylan Charrat para coronarse campeón.
Ese mismo mes de septiembre llegó la segunda renuncia de un campeón europeo español: Sandor Martin (Barcelona, 1993). El púgil catalán abandonó el título europeo de peso ligero que había conquistado en julio de 2019 y defendido con éxito en dos ocasiones. También quería dar el salto a América para asomarse a la pelea por el campeonato mundial.
A Kerman se le presenta ahora el mismo camino que a Sergio García y a Sandor Martin cuando renunciaron a sus campeonatos. A uno le fue mejor que al otro, eso sí. Ambos pelearon en 2021 por primera vez en Estados Unidos, pero solo Sandor se llevó la victoria contra su rival. Fue en octubre, cuando se lució peleando contra el excampeón Mikey García. Desde entonces, su nombre ha quedado marcado en tierras americanas.
En diciembre llegó el turno de Sergio García, que tenía una gran oportunidad en la eliminatoria mundialista del Consejo Mundial de Boxeo (WBC). El rival de 'El Niño' era el estadounidense Sebastián Fundora, quien se llevó la victoria por decisión unánima con dos decisiones sospechosas entre los tres jueces de la pelea. El peso del combate lo llevó el cántabro, pero incomprensiblemente el resultado cayó hacia el otro lado.
Kerman buscará lo mismo: un combate que le acerque a la posibilidad de disputar el título del mundo a medio plazo. Actualmente, ocupa el puesto 3 en el ranking de la Asociación Mundial de Boxeo (WBA). Su nombre es reconocido y quiere un penúltimo reto que le plante ante la gran pelea de su vida.
El 2022 también traerá más peleas en Estados Unidos de los españoles. Sergio García se ganó otra oportunidad y Sandor Martin está convencido de que este año, por fin, peleará por el título. Solo hay que esperar que se vaya definiendo un calendario en el que ahora se hace un hueco Kerman.
El título de Kiko Martínez
La pelea que sí está confirmada es la que tendrá Kiko Martínez (Caniles, 1986) ante Josh Warrington el 26 de marzo en Inglaterra (Leeds). Será la primera vez que defienda el campeonato mundial IBF del peso pluma que conquistó en noviembre de 2021. En la historia del boxeo nacional quedó su victoria ante el campeón inglés Kid Galahad tras noquearlo en el sexto asalto de su contienda.
Para Kiko es una cita especial, por las cuentas pendientes que tiene con Warrington. La primera vez que se midieron fue en mayo de 2017, sin el título mundial en juego. La victoria fue para el inglés a los puntos tras un polémico fallo de los jueces a su favor: dos dieron el triunfo a Warrington y otro votó empate. Las sensaciones de aquella pelea fueron muy diferentes a lo que reflejaromn los votos.
El 2022 será el último año de Kiko Martínez en el boxeo profesional y quiere decir adiós de una manera que le identifica: peleando y defendiendo su título hasta el final. De ganar a Warrington el mes que viene podría aspirar a unificar dos cinturones (IBF y OMB) ante el mexicano Emanuel Navarrete. La ilusión es máxima con él y la generación que viene justo por detrás con Sandor, Kerman y Sergio García.
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