España se jugará el pase a semifinales de la Copa Davis sin ninguno de los jugadores que construyeron la leyenda de la mejor selección del siglo XXI. Conchita Martínez anunció este martes un equipo formado por Pablo Carreño, Albert Ramos, Marcel Granollers y Marc López para viajar a Belgrado y pelear contra la Serbia de Novak Djokovic (del 7 al 9 de abril) una eliminatoria colocada en el calendario justo antes de que arranque la temporada de tierra batida, en una fecha crítica que dificultó la disponibilidad de varios de los pesos pesados de La Armada.
Por contra, los serbios dispondrán de un cuarteto de gala conformado por Djokovic, Viktor Troicki, Dusan Lajovic y Nenad Zimonjic, que también es el capitán. A diferencia de España, los locales contarán con sus tres primeros tenistas del ranking, reforzando su favoritismo para superar el compromiso con victoria.
Por ejemplo, y cumpliendo con lo que había avisado en Acapulco hace unas semanas, Rafael Nadal tomó la decisión de prepararse para su parte más importante del año después de estar casi 10 meses sin jugar en arcilla en lugar de ir a la Davis, porque eso le habría dejado con una semana para hacer la transición de pista dura a pista de tierra y llegar listo al Masters 1000 de Montecarlo (desde el 16 de abril). El campeón de 14 grandes, que se había comprometido con Martínez a estar en la primera eliminatoria de 2017 y ausentarse en la segunda, no pudo ir a Croacia tras llegar a la final del Abierto de Australia y seguir el descanso recomendado por sus médicos.
Como el mallorquín, Roberto Bautista, uno de los responsables de la victoria en la primera serie (ganó sus dos encuentros individuales), parará también antes de la tierra para recuperarse de los problemas abdominales que le obligaron a retirarse en la tercera ronda Indian Wells y que le siguen limitando a la hora de sacar, algo que lleva padeciendo desde el primer día que saltó a la pista en Miami.
Ni David Ferrer (tres derrotas consecutivas) ni Feliciano López (cuatro) pasan por un momento que les permita pensar en ir con España y enfrentarse a la presión de ponerse la camiseta antes de arreglar el problema que tienen encima. Fernando Verdasco acabó en Miami con una sobrecarga en los antebrazos, dolorido en la rodilla y planteándose si jugaría toda la gira de tierra, aunque en principio su plan pasa por estar en Houston y luego ver si compite en Montecarlo.
Así, Martínez llamó a Carreño, que pasa por un momento dulce y es el tercer mejor español del ranking, para liderar al equipo. Sobre el gijonés, que se bautizó con España ante Croacia (perdió su primer encuentro dejando escapar tres puntos de partido, pero cerró con victoria el quinto y decisivo punto), recaerá por primera vez la responsabilidad de comandar a un equipo completado con Ramos (24 mundial), Granollers (41) y López (15 en dobles).
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