Londres (enviado especial)

Novak Djokovic celebró el título de campeón de Wimbledon el domingo, pero lo ganó entre el viernes y el sábado cuando derrotó a Rafael Nadal en un partido que conquistó por 10-8 en el quinto set tras más de cinco horas de eléctrica batalla. En la final contra Kevin Anderson, el serbio se encontró con una alfombra roja que recorrió para levantar su cuarto trofeo en el templo de la hierba (2011, 2014 y 2015), poniendo fin de una vez por todas a la crisis más importante de su carrera. Con el triunfo (6-2, 6-2 y 7-6), Nole se disparó hasta los 13 grandes, a uno de los 14 de Pete Sampras, y volvió a gobernar en uno de los escenarios más prestigiosos del circuito, tras más de dos años sin hacerlo (Roland Garros 2016). Ahora sí: Nole ya está aquí. [Narración y estadísticas]



En algo más de una hora, Djokovic tenía la copa a tiro (6-2 y 6-2) tras pasar por encima del sudafricano. Anderson, vencedor el viernes del tercer encuentro más largo de todos los tiempos ante John Isner (6h36m que terminaron con un 26-24 en la quinta manga), salió a competir contra el serbio sin convencimiento en la victoria, y lógicamente eso se tradujo en una débil puesta en escena que Nole aprovechó desde el arranque.



Oliendo el miedo de su rival, un poco impresionado por el escenario y quizás sobrepasado por la oportunidad de conseguir su primer Grand Slam tras dejar escapar la anterior (hace unos meses en el Abierto de los Estados Unidos), Djokovic se lanzó a destripar al número ocho.



Sin el apoyo de su poderoso saque, uno de los mejores del mundo, Anderson sufrió mucho para contener a su contrario, que con la bola en juego demostró una superioridad evidente. Manteniendo la brillantez de todo el torneo, tan bien al ataque como a la defensa, Nole ganó la final en un suspiro, llevándose los dos primeros parciales sin pasar apuros, y solo se enfrentó a un mal trago en el tercero, donde necesitó salvar cinco bolas de set (dos sacando para 5-5 y otras tres buscando el 6-6) antes de levantar los brazos en un tie-break que compitió con valentía.



Al fin, Djokovic está de vuelta.

Noticias relacionadas