Rafa Nadal cede también ante Djokovic en el Six King Slam en un partido con sabor a despedida de una época

El reflejo de una época que pasa a mejor vida. La evidencia de que los años pasan para todos, incluso para los mejores de la historia. Rafa Nadal cedió ante Novak Djokovic en el partido por el tercer y el cuarto puesto del King Six Slam (6-2, 7-6) y no pudo tomarse la revancha de lo sucedido en los Juegos Olímpicos. 

Fue un partido que desprendió un serio aroma al adiós a una época dorada del tenis. Con una sonrisa en la boca, Rafa Nadal se despidió del público en una de sus últimas apariciones públicas en una cancha. La siguiente, en la que quiere poner el broche de oro a su impresionante carrera deportiva, será en la Copa Davis que se disputará en Málaga.

Tras un primer set en el que Nole fue notablemente superior y que terminó con un claro 6-2 a favor del serbio, Rafa Nadal sacó músculo en la segunda manga. Incluso llegó a salvar una bola de partido para posteriormente hacer gala de algunos de los mejores golpes que han presidido su carrera, pero en el tiebreak Djokovic terminó imponiendo su ley para llevarse la victoria.

El abrazo entre dos leyendas

Las semifinales de este torneo de exhibición multimillonario habían puesto las cosas en su sitio. En la pelea por el tercer y el cuarto puesto, las viejas glorias. En la disputa por el título, la nueva hornada comandada por Jannik Sinner y Carlos Alcaraz. 

El resultado indicó, como era previsible, que la distancia entre Djokovic y Nadal ya es grande. Fue evidente en la segunda ronda de los Juegos Olímpicos, el último partido oficial, donde el serbio logró un cómodo triunfo por 6-1 y 6-4 en el camino hacia el oro que ganó días después.

También en esta exhibición donde Djokovic, que aún planta cara a los mejores, obtuvo un triunfo evidente, notable, en un partido que ya arrancó con una rotura al servicio de Nadal y un desequilibrio de 2-0 que marcó la primera manga que se apuntó el de Belgrado por un significativo 6-2.

El segundo set fue diferente porque Rafa Nadal subió el nivel. Pudo situarse con 4-2 y saque tras tres bolas de rotura, aunque Djokovic consiguió resistir como pudo. No sólo eso, sino que con su saque llegó a gozar de la primera bola de partido que Rafa Nadal salvó para alargar un poco más el disfrute del público.

Ahí el español se vino arriba, sacó su garra y hasta alzó el puño cerrado al cielo en alguna ocasión para celebrar algún punto. Como en los viejos tiempos. Así se llegó al tiebreak, donde Nole cerró con un 7-5 a favor para dar paso a un gran abrazo entre dos de los grandes protagonistas de la historia del tenis.