Image: Un travesti llamado James Franco

Image: Un travesti llamado James Franco

Arte

Un travesti llamado James Franco

El actor expone en Nueva York su última serie de fotografías en la que se convierte en los personajes de las obras más famosas de Cindy Sherman

15 abril, 2014 02:00

New Film Still #58, 2013. Gelatina de plata, 76.2 x 101.6 cm

Actor de éxito, guionista, productor, director, modelo y escritor. El polifacético James Franco (Palo Alto, California, 1978), conocido por su papel de Harry Osborn en la trilogía de Spider-Man de Sam Saimi (2002-2004-2007) y aclamado -y nominado al Oscar- por su interpretación en la asfixiante 127 horas de Danny Boyle (2010), acaba de inaugurar su segunda exposición como artista en la prestigiosa Pace Gallery de Nueva York.

Aunque lo único que ha trascendido de esta exposición en España sea el incidente del actor con una menor a la que pidió una cita -y quizá algo más- a través de la red social Instagram, poco después de haberla conocido en la inauguración, lo cierto es que el actor hace un divertido guiño a la reconocida artista Cindy Sherman (1954) en su última serie de fotografías.

Travestido a la manera de las mujeres de Sherman en las Untitled Film Stills de finales de los 70, Franco emula, en las que ha bautizado como New Film Stills, los trajes, poses, miradas y escenografías que la fotógrafa, una de las representantes más importantes de la fotografía contemporánea norteamericana, creó en su serie más famosa. Compuesta por 69 instantáneas en blanco y negro, tomadas entre 1977 y 1980, Sherman se autorretrata representando personajes ficticios -mujeres- que, por el ambiente que los rodea, bien podrían ser actrices de una película.


New Film Still #21, 2013. Gelatina de plata, 76.2 x 101.6 cm.

"Cindy es una artista que usa el cine como fuente para su trabajo -ha dicho James Franco-. Ella 'juega' a ser actriz. Yo soy un actor que se mete dentro de su trabajo. Igual que Cindy usa el cine para crear un lugar, yo uso el arte para crear un lugar", explica el actor que alude también al trabajo de sus "artistas favoritos", muchos de los cuales trabajan también con el cine: Douglas Gordon, Richard Prince, Dan Colen, Nate Lowman o Paul MacCarthy. "Estas fotografías me permiten -continúa el artista en la nota de prensa de la galería- colocarme a un lado, mirar atrás y replantearme mi trabajo en Hollywood".

Arte con dos rombos

No es la primera exposición de James Franco que ya en junio de 2013 inauguró en la sede londinense de la Pace su personal homenaje a Hitchcock, recreando en la sala de la galería un particular y agresivo escenario de Psicosis en la instalación Pycho Nacirema, en la que trabajó con su admirado Douglas Gordon. En aquella ocasión, la galería no dudo en calificar la muestra "para mayores de 18 años", por la violencia de las imágenes y la alusión al sexo explícito de las mismas.

Antes, el artista, que ya había pasado por colectivas en el MoMA de Nueva York y en el Museum of Contemporary Art de Los Ángeles, expuso en Clocktower, uno de los espacios alternativos más reconocidos de Manhattan, dirigido por Alanna Heiss, fundadora también del P.S.1., lo que también nos da una idea de los padrinos artísticos del actor. La muestra se llamó The Dangerous Book Four Boys (2010) y allí los protagonistas fueron sus películas experimentales, fotografías y dibujos en los que exploraba asuntos como la infancia y la nostalgia, el juego y la destrucción, con el paisaje americano como fondo.


New Film Still #32, 2013. Gelatina de plata, 76.2 x 101.6 cm.

Las New Film Stills de Franco, que pueden verse hasta el 3 de mayo en la Pace Gallery de Nueva York, están impresas sobre gelatina de plata -como las de Sherman-, realizadas en ediciones de 3 o de 10 y tienen un precio de entre 6.000 y 15.000 dólares (4.416-11.040 euros). Muy lejos todavía de los 3,9 millones de dólares (2.870.400 euros) que una de las imágenes de la fotógrafa de Nueva Jersey alcanzó en 2011 al subastarse en Christie's Nueva York.