La inauguración (oficial) de ARCO se centra en Perú
El Rey Felipe VI y la Reina Letizia inauguran la 38ª edición la feria con un breve recorrido por algunos de los expositores.
La hora de llegada era las 11 de la mañana pero los fotógrafos, periodistas y curiosos se iban acercando al punto de encuentro un rato antes. Con extrema puntualidad el Rey Felipe VI y la Reina Letizia Ortiz han entrado en el Pabellón 7 de Ifema para inaugurar de manera oficial esta edición de ARCOmadrid. El recorrido, que ha durado algo menos de una hora, se ha centrado, sobre todo, en varios stands de Perú, país invitado de este año. Los monarcas, junto a Martín Vizcarra, Presidente de la República de Perú, y la primera dama Maribel Díaz Cabello, se han parado a hablar con los galeristas, que han tenido la oportunidad de explicarles sus obras. La primera parada ha sido en el stand del diario El País que expone las obras del artista peruano Fernando Bryce junto a una instalación de Alicia Martín. Tras saludar a Javier Monzón, han hecho un alto en Perú en ARCO, la sección en la que se concentran las obras de 23 artistas peruanos que viven y trabajan en distintas ciudades. La siguiente galería visitada ha sido la brasileña Fortes D'Aloia & Gabriel, que en esta ocasión trae obras de Armando Andrade Tudela, Ernesto Neto o Sara Ramo. A pocos metros saludaban a la veterana galerista Elba Benítez, Premio Arte y Mecenazgo de "la Caixa" 2017, que expone obras de artistas de renombre como Ignasi Aballí, Cristina Iglesias, Carlos Garaicoa, Carlos Bunga, Fernanda Fragateiro o Guillermo Kuitca. También la galería argentina de Ruth Benzacar ha sido objeto de interés de un recorrido determinado de antemano. En este stand se han centrado en una obra “que cruza arte y ciencia”, cuenta Orly Benzacar, que pronto tomará el testigo de su madre, Ruth. Para crear la pieza Wall of Gazes “se trabajó con el recorrido de la mirada al ver un retrato”. Tras analizar el movimiento de los ojos de 70 personas mirando un mismo retrato, el trabajo recrea punto a punto lo que un ordenador ha monitorizado. Las dos piezas, que aún buscan un nuevo lugar de residencia, se venden tanto de manera separada por 12.000 euros cada una, o en conjunto por 20.000.Imagen de ARCO 2019