El Museo del Prado vuelve a superar su récord antes de que acabe el año: 3,26 millones de visitantes en 2024

El Museo Nacional del Prado ha superado, antes de que finalice 2024, el récord de visitantes alcanzado el pasado año. La cifra hasta este domingo se eleva a 3.258.328 frente a los 3.241.263 registrados en 2023, de los cuales el 60% no es residente en España.

Es el segundo año consecutivo en el que el Prado bate su récord de visitantes. El año pasado lo logró dos días antes de que acabara el año, pero en esta ocasión lo ha conseguido tres semanas antes. El récord anterior a los de 2024 y 2023 se produjo antes de la pandemia, en 2019, año de la celebración del bicentenario del museo.

Del total de visitas de 2024 hasta ahora, 1.459.026 personas (un 44,78%) han accedido al Museo de forma gratuita. Para el director, Miguel Falomir, es especialmente relevante que el récord se superase un sábado con apertura nocturna gratuita: “No estamos interesados sólo en lograr ser atractivos por incrementar los registros, sino también por abrir la institución a nuevos públicos como los que vienen al ‘Prado de noche’”.

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El mes que ha registrado un mayor número de visitas ha sido mayo —con más de 327.000 personas— mientras que el sábado 18 de dicho mes (en el que coincidían Día y Noche de los Museos) se ha convertido en la fecha (provisional hasta que finalice 2024) de mayor afluencia de público, con un total de 14.497 visitantes.

Además del gran atractivo de su colección permanente, El Prado ha atraído al público este año con su programa de exposiciones temporales, entre las que figuró Reversos, que exploraba la cara oculta de las obras de arte; Arte y transformaciones sociales en España (1885-1910) y El taller de Rubens, que todavía puede visitarse. También están aún abiertas al público Darse la mano. Escultura y color en el Siglo de Oro, y Juramentos de papel. El pacto ciudadano en los dibujos de José de Madrazo.

También se expuso de marzo a junio Bodegón con cidras, naranjas y rosa, la única naturaleza muerta firmada y fechada por Zurbarán; y desde mayo hasta febrero del año que viene puede verse en el museo el famoso Ecce Homo de Caravaggio, cuadro que fue descubierto recientemente cuando salió a la luz en la casa de subastas Ansorena. Fue precisamente el Museo del Prado el que alertó en 2021 al Ministerio de Cultura para que paralizase la subasta de la obra, que había sido erróneamente atribuida a un alumno de José de Ribera y se ponía a la venta con un precio de salida de 1.500 euros.

La Comunidad de Madrid declaró la obra Bien de Interés Cultural y fue restaurada. El cuadro formó parte de la colección privada de Felipe IV y desde hace varias generaciones pertenecía a la familia Pérez de Castro. En mayo de este año se supo que un coleccionista británico había adquirido la obra por unos 35 millones de euros y la cedió en préstamo al Prado durante nueve meses.