Spider couple, 2003

Incansable a sus 95 años, Louise Bourgeois presenta una retrospectiva en Bielefeld, Alemania, dedicada al tema de la familia, tan recurrente en su obra.

Louise Bourgeois se presenta a lo grande en la Kunsthalle de Bielefeld. 120 obras (veinte pinturas, más de sesenta dibujos, treinta y cinco esculturas y cinco bordados) con las que aborda el tema de la familia, concepto sobre el que ha girado buena parte de su obra. Así pues, se puede entender esta exposición como una mirada autobiográfica. Bourgeois nació en París en 1911 y primero estudió en la Sorbona matemáticas y geometría y para más tarde asistir a varias academias de arte antes de empezar historia del arte en la Ecole du Louvre. Abandonó Francia con su marido el norteamericano Robert Goldwater, que volvió a América para convertirse en conservador del MOMA. En 1940 el matrimonio adoptó a su primer hijo y más tarde Bourgeois dio a luz a otros dos varones, Jean-Louis y Alain.

Buena parte de la obra de Louise Bourgeois habla desde el trauma. El temor de no nacer como un chico y sí como una niña no deseada, el temor a no ser necesitada, a convertirse en un estorbo para sus padres y de no dar la talla como esposa son temas que han estado presentes a lo largo de su trayectoria. Esto tiene mucho que ver con una de las premisas que le impuso su madre desde muy pronto: Louise debía aprender a hacerse indispensable. Y ese miedo a "no dar la talla" es, en esencia, una de las claves para entender la posición desde la que ha venido creando. Muchas de sus primeras obras (no hay que olvidar que Bourgeois tardó en empezar a producir) giran en torno a la familia y son éstas las que se verán en esta exposición de Bielefeld. En muchas obras vemos un cuerpo sin brazos o un rostro cubierto por un delantal, o incluso recluido en un espacio alto y estrecho, en el que no se puede sentar o tumbar para descansar. La obra de Bourgeois es una acumulación de recuerdos con los que trata de espantar sus fantasmas. En más de una ocasión ha afirmado su deseo de olvidar el pasado "para derrotarlo" La artista francesa dice que la escultura le ayudó a superar muchos de sus traumas infantiles, la muerte de su madreen 1932, la presencia constante de una institutriz que acabaría siendo la amante de su padre durante 10 años…Ella misma cuenta cómo un día, comiendo, hizo una pequeña esculturilla de su con miga de pan. Cuando ya había tomado forma, cogió el cuchillo y le corto los brazos y las piernas. Esta idea de la amputación pudo venirle del hecho que su casa se encontrara junto a un matadero. La idea de los cuerpos malformados, como amputados, es, también, central en su trabajo.

Algunas piezas míticas pueden verse en esta exposición. "Spider" de 1997 es una de sus grandes obras, realizada en 1997. Una gran araña custodia una celda de marcado sentido vertical en cuyo interior podemos ver un gran tapiz dispuesto sobre una silla. Es una referencia evidente a su infancia y al tiempo que dedicó junto a su madre realizando tapices en una aldea cercana a París. Junto a "Spider", la Kunsthalle de Bielfeld expone obra de todas las épocas de la artista francesa en una de las exposiciones más sugerentes de la temporada.