Parte del montaje de Ricardo Santonja para Tentaciones

Desde hoy y hasta el 5 de noviembre, Estampa abre en Madrid las puertas al grabado y otras ediciones de arte. Son cien expositores con obras de más de 2.000 artistas que colgarán de los muros del pabellón "la Pipa" en el Recinto Ferial de la Casa de Campo. Más de 70.000 visitantes pasarán por una feria que se perfila como una de las citas imprescindibles en el mundo de la edición. Este año, Estampa consolida la presencia de las nuevas tendencias: ediciones de esculturas, fotografías e instalaciones que proliferan frente al grabado tradicional.

Cien expositores en más de 10.000 m2 muestran en esta octava edición de Estampa las obras editadas de unos 2.000 artistas. Estos son los principales datos que podemos dar a priori de un salón que se consolida, año tras año, en España y en Europa como uno de los más importantes en la edición de obras de arte contemporáneo. Una feria internacional a la que el año pasado acudieron casi 70.000 visitantes y en la que se realizaron ventas (oficiales) por valor de 800 millones de pesetas.

Desde su nacimiento en 1993, Estampa ha recorrido un largo camino: pocos fueron los expositores de aquella primera edición en el Palacio de Velázquez y 16.000 fueron los espectadores que visitaron entonces los 850 m2. "Hoy se puede sin duda afirmar que Estampa crece a un ritmo anual del 15-20 por ciento. Por lo que cabe esperar el mismo incremento para esta edición", asegura Víctor del Campo, director de la feria.

Este año, además, algunas cosas han cambiado con respecto a las galerías que quieren participar en el salón. Hay nuevas normas de admisión. "Normas -dice Del Campo- destinadas a evitar la presencia de espacios cuyas exposiciones se alejaban cada vez más del arte y se acercaban a la artesanía del grabado". Hay que tener en cuenta que, a pesar del crecimiento de visitantes y metros disponibles, las galerías no han aumentado con respecto al año pasado. "No debe haber más de cien expositores. Serían demasiados. Es importante ver que, a diferencia de otras ferias de arte, éste no es un salón pensado para las galerías sino para el público. El único protagonista aquí es el artista y, en segundo lugar, el espectador", afirma el director.

Tampoco conviene olvidar que la edición de obras ya no es lo que era y que los contenidos de Estampa también han sufrido variaciones fundamentales en los últimos años. A las carpetas tradicionales de grabado se han unido ya fotografías, esculturas, trabajos digitales o cualquier otra obra susceptible de ser editada. Así, a las litografías de Picasso o aguafuertes de Sean Scully (galería Estiarte, Madrid) se unen las ediciones de esculturas de Dora Salazar, Manuel Bouzo o Pepe Buitrago (galería Raquel Ponce, Madrid); las estampas digitales que presenta este año la galería Carmen de la Guerra; o las instalaciones del espacio dedicado a las Tentaciones, una sección que se ha consolidado en este su segundo año de vida y en la que 13 artistas presentan proyectos realizados para la feria y, lo más importante, en cualquier sistema de edición no tradicional. Y es que la feria no ha querido dejar pasar el tren de las nuevas tendencias del arte contemporáneo y se ha unido a ellas con este original programa.

Becas para Tentaciones

En esta ocasión, Alberto Corazón y Ouka Lele son los artistas más conocidos de este "espacio alternativo". El primero utiliza en su Pieza de conversación la estampación digital para mostrar al espectador nuevas perspectivas de la obra de arte. Mientras, la fotógrafa ha trabajado con sus dos hermanos, Gabriel y Patricia, en La casita del bosque, un proyecto tridimensional y sensorial que nos remite al mundo de la infancia. Junto a ellos, la instalación Objetos personales de Dora Salazar, la de Ignacio Casares (que participa aquí por segunda vez) o la de Ricardo Santonja (Stanza Berlín-fotoescultura ondulada), y los trabajos de Juan de Sande, Lidia Benavides, Juan Alberto García de Cubas, Eliana Perinat, Corina Yllera, Rocío Asensi Vallejo, Eva Miguel y Mónika Röhle. Por cierto que la Casa de Velázquez -que acude a Estampa por primera vez con obras de sus becarios en Madrid- otorgará dos becas a los dos jóvenes artistas de Tentaciones que un jurado elegirá antes de que termine la feria.

Capital del grabado

Aunque entre los participantes hay muchos talleres y escuelas de grabado, los expositores que más abundan siguen siendo las galerías de arte y, sobre todo, las de Madrid. Sin olvidar, por supuesto, la importante presencia de espacios latinoamericanos (Hoy en el arte, Arte Privado, ambas de Argentina; EsArt, de Bolivia; Sextante, de Colombia; o Escapini Lamarca, de Paraguay) y europeos (Italarte, de Italia; el Centro Portugués de Serigrafía; la Artoteka, de Austria; Uusitalo, de Helsinki; o Les Editions Lurier Dubé, de Francia;). También desde Francia, de los talleres de la Imprimerie National de París llega un texto inédito y última publicación escrita de Gonzalo Torrente Ballester, ilustrado con seis litografías de Bonifacio (el precio del libro es de 200.000 pesetas).

Pero, como es lógico, las galerías especializadas en la edición en la capital ("capital del grabado", como la llama Víctor del Campo) vuelcan sus esfuerzos en estos cinco días de feria. La Caja Negra, con sólo dos años de vida y un fondo de más de 200 artistas, muestra en Estampa ediciones de Alfredo Alcaín, Hernández Pijuan, Santiago Serrano o el joven Unai San Martín. Estiarte presenta dos series de grabados de Javier de Juan y Rafael Canales especialmente editadas para la feria, además, entre otras cosas, de una carpeta de Manolo Millares.

El cartel de Feito

Brita Prinz, otra de las especialistas madrileñas, apuesta por los artistas de los talleres de la galería: Eva Miguel o Roberto Arce, que comparten protagonismo con obra gráfica de Sicilia, Genovés o Canogar. BAT, la galería de Alberto Cornejo, dedicará todo su espacio a Luis Feito, del que muestra un libro con seis aguafuertes que ilustran poemas de San Juan de la Cruz, y las series (28 planchas en total) editadas por la galería. Y es precisamente Feito uno de los pilares de Estampa para la que el artista ha realizado el cartel de la feria, que ha querido así rendirle homenaje. Es la primera vez que Estampa encarga su imagen a un artista, aunque parece que no va a ser la última.

En cuanto a los espacios de fuera de Madrid, destaca la presencia de Arteko, de San Sebastián (con un libro de autor de Dora Salazar); Luna, de La Gomera (con obra de artistas que trabajan en las islas); Galería Centro de Arte, de León (con obra reciente de Pablo Rodríguez Guy o Lorenz González); o Estampería, de Baleares (con grabados de Beuys, Man Ray o Larry Rivers).

Este año Estampa ha querido seleccionar una pequeña muestra con lo más representativo de de la obra de tres importantes y desconocidos grabadores: Joan, Julio y Roberta González, el conocido escultor, su hermano y su hija. Además, los II Encuentros Juana Mordó, sobre la gestión profesional de la mujer en la cultura, se dedicarán, durante mañana y pasado, a analizar el tema desde la óptica de las administraciones públicas.

Arte en el metro

Y para que nadie se olvide de que Estampa se mueve y de qué manera, los pasajeros del Metro de Madrid podrán disfrutar durante unos días de tres exposiciones en tres estaciones de la capital: Avenida de América (con figuras claves del arte contemporáneo español: Picasso, Juan Gris o Chillida); Gregorio Marañón (con artistas de referencia internacional, como Kokoschka, Calder o Sonia Delaunay); y Canal (con representantes de las nuevas tendencias, como Barceló, Uslé, Soledad Sevilla o Alcaraz). Ediciones que colgarán de las paredes de vestíbulos, pasillos y andenes hasta el próximo 12 de noviembre.

LO QUE HAY QUE SABER

Fechas: Del 1 al 5 de noviembre de 2000
Lugar: Recinto Ferial Casa de Campo
Pabellón XI "La Pipa"
Avda. de Portugal s/n
Horario: De 12:00 a 21:00 horas
Metro: Línea 6 - Alto de Extremadura
Autobuses: 31 - 33 - 36 - 39 - 65
Aparcamiento gratuito
Nº de expositores: 100
Metros: 10.200 m2
Artistas: Más de 2.000
Catálogo: 4.000 pesetas