El auge de internet, donde es tan fácil autopublicarse disimuladamente, y la crisis dieron al traste con buena parte de las revistas de poesía que se editaban en España. No es que desaparecieran del todo, pero el diálogo fértil que suponía la convivencia de poetas diferentes en cada número se vio sustituido en buena medida por los monólogos paralelos que son los blogs la mayoría de las veces. Por eso sólo cabe alegrarse de la aparición, en apenas unos días, de dos nuevas revistas dedicadas a la poesía hechas en España.

Años diez, dirigida por Juan Carlos Reche con Abraham Gragera como subdirector, y editada por Cuadernos del Vigía, tiene, según la nota de prensa, como objetivo “ser un lugar de reflexión sobre el estado de la poesía y las poéticas en la segunda década del siglo XXI, así como recuperar algunas voces y poéticas poco difundidas”. Tanto Reche como Gragera son lectores atentos no sólo de las tradiciones de la poesía en castellano sino también informados ojeadores de otras literaturas, así que son garantía de interés seguro. En este primer número cuentan además con la ayuda de Fruela Fernández, que aquí presenta unos poemas de Sandra McPherson y que, además de lector curioso y con gusto también él, es uno de los traductores más admirables de la última hornada (además de un poeta con una propuesta original y nada superficial que conviene seguir muy de cerca; por más que aquí le pusiera uno algunos reparos personales y probablemente equivocados a su último libro, Folk, cosa que sólo hacemos con los libros que creemos que de veras valen la pena). Más cosas de este número: J. H. Prynne en versión de Mario Jurado, poemas de Rafael Álvarez Merlo, Juan Manuel Cabrera y Guillermo López Gallego, unas cartas uruguayas de Gerardo Diego más curiosas que otra cosa, una entrevista con Valerio Magrelli y el ensayo fundamental de Charles Olson “El verso proyectivo”. Muchas cosas muy interesantes.

La otra revista que ve la luz por vez primera en estos días es Anáfora, coordinada por Esther Flórez, Cristian David López, Pablo Núñez y María Esther Olivares. Surgida al calor de la ya vetusta tertulia ovetense Óliver, toma el testigo de otras como Escrito en el agua o Reloj de arena para comenzar a publicar los poemas y relatos de los más jóvenes de la tertulia. Destacan en este primer número, que incluye también poemas de Andrés Trapiello o Luis Alberto de Cuenca, las prosas de Ana Vega y los aforismos de Cristian David López. Promete, y mucho, Anáfora. Hay poemas, algunas traducciones de poetas ya conocidos, y una entrevista con Javier Almuzara, que acaba de publicar en la editorial Renacimiento una antología de su poesía con abundante material inédito y una nueva versión de las Rubayatas de Omar Jayyam. Una de las pocas cosas que deberían aprender los coordinadores de esta nueva revista es a decir no: las fichas de ciudades de Vicente García no hubieran pasado ni la preselección del concurso de redacción de egb de la Coca-cola. Bienvenidas y larga vida.