[caption id="attachment_663" width="393"] Xavier Theros y Rafael Metlikovez forman Accidents Polipoètics.[/caption]

Una línea muy fina separa el aforismo del chiste. Y, del mismo modo que hay aforismos que son chistes sin querer, hay chistes que son aforismos igualmente sin haberlo pretendido.

Baby bum, la última entrega de Accidents Polipoètics (Arrebato), la suma de Rafael Metlikovez (Canovelles, 1964) y Xavier Theros (Barcelona, 1963), parece haber hecho de este descubrimiento su lema. Si bien algunas de las secciones están hiladas, hay una cierta pretensión de texto conjunto y acaba con un poema largo y un chiste sobre Fraga Iribarne, puede leerse también como un libro de aforismos llenos de ingenio, humor y sentido crítico. Ha leído uno muchos libros de aforismos “serios” con mucha menos agudeza y verdad que estos aparentemente chistosos. Y es que cualquier risa es la risa de nuestra calavera. Copio aquí una pequeña muestra de todo lo bueno que el libro contiene.  No diría uno que esto haya que leerlo como poesía, o que ellos sean “uno de los exponentes de la poesía europea contemporánea”, como ha leído uno por ahí en alguna cosa promocional (tal vez lo sean del show europeo), pero ni falta que hace. Búsquenlo, merece la pena.

El fin justifica los miedos.

Todas las guerras son santas, sólo la paz es atea.

Los hay que sólo quieren aprender lo que ya saben.

Una sábana tendida siempre me hace pensar en fantasmas desnudos.

Si te haces a ti mismo, te sobrarán piezas.

Soberanismo, cosa de hombres.

Las calles apestan a Navidad.

Se ahorcó de su árbol genealógico.

Suspicaz es aquél que se cuenta los dedos después de dar la mano.

Un sifón es una botella que quiere hacerse pasar por caballo de ajedrez.

Tenía un corazón tan débil que le hicieron un bye bye pass.

No es bueno que los hombres estemos solos, dijo Adán. Y de una de las costillas de Eva creó a Dios.

Las mujeres que se liman las uñas, están preparando su fuga.

Cruzar el océano a nado y equivocarse de dirección.

Desde que me enamoré de una sirena ando muy escamado.

Si hay un cuarto de estar, ¿por qué no hay un cuarto de ser?