Riesgo y grandes maestros
Lo mejor de 2002. Cine
26 diciembre, 2002 01:00Escena de Mulholland Drive
Abstracción, universos personales, riesgo formal, futuros descompuestos... el mejor cine del 2002 no le teme al abismo y se aleja de las convenciones cinematográficas. De las votaciones efectuadas por los críticos cinematográficos consultados por El Cultural, directores tan insobornables y genuinos como David Lynch y David Cronenberg abren y cierran, respectivamente, el ranking de las cinco películas mejor valoradas. El cine independiente norteamericano, a salvo de las modas y los imperativos del mercado, ha deparado los mejores y más arriesgados trabajos del año, mientras que una sola película europea -la francesa Vete a saber- ha encontrado su lugar entre los grandes. El denominador común: cineastas de prestigio detrás de la cámara.
Director: David Lynch / Guión: David Lynch / Director de Fotografía: Peter Deming / Reparto: Justin Theroux, Laura Elena Harring, Noami Watts, Ann Miller
Misteriosa, provocadora, abstracta, excéntrica, onírica... Mullholland Drive es todo eso y más, una película lynchinana hasta sus últimas consecuencias: sus virtudes para unos son defectos para otros. Pero por encima de todo, el noveno largometraje de David Lynch es un acto creativo en estado salvaje, capaz de seducir y de enfurecer a partes iguales. En la inocente pesquisa detectivesca de Rita y Betty se dan cita los temas más recurrentes y las obsesiones más disparatadas del autor de Carretera perdida, película con la que comparte muchas líneas temáticas. De nuevo, los juegos de identidad, los mundos paralelos y la combinación entre lo bello y lo siniestro, ponen a prueba la lógica del espectador. El universo lynchiano parece interminable, y esta vez ha sorpendido con una historia de amor desesperada en el decadente, opresivo y corrupto entorno hollywoodense.
Vete a saber (va savoir)
Director: Jacques Rivette Guión: P. Bonitzer, C. Laurent, Rivette Dtor. de Fotografía: William Lubtchansky Reparto: Jeanne Balibar, Sergio Castellitto, Marianne Basler, Jacques Bonnaffé
Sin perder nunca el sentido del humor, Jacques Rivette explora en esta sabia película, llena de inteligencia y libertad, las divagaciones del amor entre tres hombres y tres mujeres. Sus vidas se cruzan durante la breve aparición en cartelera de la obra de Pirandello Come tu mi vuoi, un recurso narrativo muy frecuente en la obra del veterano cineasta galo: establecer el conflicto entre la ficción teatral y la vida real. Entre el costumbrismo y la sofisticación, el autor de Céline y Julie van en barco construye una comedia explosiva sostenida por enjundiosas interpretaciones. Un viaje al espíritu humano y a las grandes emociones.
Minority Report
Director: Steven Spielberg Guión: Scott Frank, John Cohen Director de Fotografía: Janusz Kaminski Reparto: Tom Cruise, Samantha Morton
Continuación lógica del siniestro cuento AI. Inteligencia Artificial, esta película es sin duda la más oscura y pesimista de Steven Spielberg. Su visión del futuro, hecha a imagen y semejanza de una pesadilla -basada en un relato de Philip K. Dick, mente inspiradora también de Blade Runner y Desafío total-, parece responder a la evolución lógica del ser humano dentro de medio siglo: una sociedad tecnocratizada, paranoica, vigilante, en la que ver, prever y ser visto son parte esencial de la ficción de vivir. En Minority Report, la ciencia-ficción y el film noir se buscan y se encuentran, construyendo un universo formal de gran complejidad ética y estética, pero que nunca pierde su condición de fábula, ni el ritmo trepidante propio del creador de Indiana Jones. Con esta película, el sentimentalismo de Spielberg -su evidente talón de Aquiles- se ha transformado en sabia melancolía.
Monster's Ball
Director: Marc Foster Guión: Milo Addica y Will Rokos Director de Fotografía: Roberto Schaefer Reparto: Halle Berry, Billy Bob Thornton
Fábula sobre la absolución y la redención, en Monster's Ball todo pende de un hilo: su arriesgado argumento, que baila en el límite entre el melodrama y la denuncia social; su belleza formal, que contrasta con la dureza del relato; su ritmo pausado y su atípica estructura. El riesgo, precisamente, provoca el milagro. La verdad que destila este filme, la efectividad de su planteamiento y la complejidad de sus personajes hacen de Monster's Ball una producción única e irrepetible, con una voz que bebe tanto de los Coen como de Raymond Carver. A la solidez de su argumento, que se acerca a los prejuicios raciales desde una perspectiva insólita, se añaden las depuradas interpretaciones de Billy Bob Thorton y Halle Berry, protagonistas de un romance en el que el deseo es la proyección de la necesidad y el sexo un lenitivo contra el dolor.
Spider
Director: David Cronenberg Guión: Patrick McGrath y David Cronenberg Director de Fotografía: Peter Suschitzky Reparto: Ralph Fiennes, Miranda Richardson, Gabriel Byrne
Si alguien podía hacer entender al espectador qué misteriosos caminos recorre la mente de un esquizofrénico, ése es David Cronenberg. La multioscarizada Una mente maravillosa de Ron Howard es una broma pesada al lado de Spider. El autor de Crash maneja como nadie los hilos de la psique humana aplicados a la narrativa cinematográfica, y en esta austera, seca y minimalista película, el viaje al fondo de la mente humana alcanza su máxima depuración, su máxima elegancia. Como el propio cineasta ha descrito, esta película tiene "el sentimiento de Samuel Beckett enfrentado al de Sigmund Freud". Es cierto: absurdo filosófico y psiquiatría construyen la tela de araña de Spider (Ralph Fiennes), un puzzle en el que el mudo y solitario protagonista es el espectador de su propio pasado (como casi todos los personajes de Cronenberg). Expresionista y subjetiva, Spider podría ser su propia versión de la bergmaniana Fresas salvajes.