Una imagen de 'Carros de fuego'

Una imagen de 'Carros de fuego'

Cine

El pódium del cine olímpico: del prodigio técnico de Leni Riefenstahl a un thriller de venganza como 'Munich'

'Carros de fuego' y 'Olympia' perduran como las películas más relevantes sobre los Juegos Olímpicos, aunque la lista es larga.

31 julio, 2024 02:00

Pies descalzos que se baten en la arena mojada: apoyo, impulso y recuperación. Rostros contra el viento rebosantes de vitalidad. Camisetas y pantalones blancos salpicados de barro. Las olas rompiendo, el cielo nublado. La imagen ligeramente ralentizada y la inolvidable música de Vangelis.

El atletismo quedó así registrado para la historia del cine en Carros de fuego (1980), un filme que aborda la peripecia de dos jóvenes británicos que se preparan para los Juegos Olímpicos de París 1924, recreados de manera convincente por Hugh Hudson. El director haría historia en los Oscar al ganar la estatuilla a la mejor película con una ópera prima. En total, recibió cuatro premios, con los de guion original, diseño de vestuario y banda sonora.

Algunos de los recursos utilizados por Hudson en las secuencias cinéticas ya los había estandarizado cuarenta años antes la cineasta alemana Leni Riefenstahl en el documental Olympia (1938), que recogía lo acontecido en Berlín 1938 a lo largo de 225 minutos.

'Olympia¡

'Olympia¡

La directora de El triunfo de la voluntad (1934) volvía a hacer un ejercicio de propaganda al servicio del nazismo, pero la película es un prodigio técnico y estético que ha marcado al cine deportivo moderno: tomas de seguimiento, cámara lenta y aceleraciones, escenas bajo el agua, panorámicas… Le valió la Copa Mussolini a la mejor película en Venecia.

Atletas famosos

Carros de fuego y Olympia perduran como las películas más relevantes sobre los Juegos Olímpicos, pero la lista de filmes que se han acercado a este evento deportivo mundial es muy extensa, con un buen número de retratos de famosos atletas.

Es el caso de cintas como Jim Thorpe, el declive de un campeón (Michel Curtiz, 1951), con Burt Lancaster interpretando a este versátil deportista estadounidense de ascendencia americana nativa que ganó dos medallas de oro en Estocolmo 1912 y que después triunfaría en el fútbol americano, el béisbol y el baloncesto; Invencible (Unbroken) (Angelina Jolie, 2014), sobre el atleta italoamericano Lous Zamperini, que compitió en Berlín 1936 antes quedar varado en el Pacífico durante 47 días en la Segunda Guerra Mundial; El héroe de Berlín (Stephen Hopkins, 2016), sobre la leyenda de Jesse Owens, el atleta negro que conquistó cuatro medallas de oro para EE.UU. bajo la mirada de Hitler en Berlín 1936; o Su mejor marca (1982), filme de debut de Robert Towne –guionista de Chinatown (Roman Polanski, 1974)– que aborda el tema de la homosexualidad en el deporte a partir de la historia de dos mujeres que se preparan para competir en Moscú 1980.

'Jim Thorpe,  el declive de un campeón'

'Jim Thorpe, el declive de un campeón'

Aunque, entre los dramas que se han adentrado de manera profunda en los vericuetos psicológicos de la competición, destaca Foxcatcher (Bennett Miller, 2014), la oscura historia del luchador estadounidense Mark Schultz, medalla de oro en Los Ángeles 84, con interpretaciones antológicas de Channing Tatum, Mark Ruffalo y Steve Carrell. En España, Àlex Murrull y Dani de la Orden nos contaron en 42 segundos (2022) la inesperada gesta del equipo de waterpolo que logró la medalla de oro en Barcelona 92.

Por otro lado, las Olimpiadas han servido de excusa, disparador o escenario de tramas de intriga o de acción, casi siempre basadas en hechos reales. Es lo que ocurre en Múnich (Steven Spielberg, 2015), donde el asesinato de varios atletas israelíes por los terroristas palestinos de Septiembre negro desencadena una venganza del Mossad que se prolongará durante décadas, o en Richard Jewell (Clint Eastwood, 2019), sobre el guardia de seguridad que evitó una matanza al descubrir una mochila con explosivos en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 y que acabó siendo investigado como presunto culpable.

Eric Bana y Daniel Craig en 'Munich'

Eric Bana y Daniel Craig en 'Munich'

Y, en clave de comedia, Astérix en los Juegos Olímpicos (Thomas Langmann, Frédéric Forestier, 2008), en donde la aldea de irreductibles galos pone a la agencia antidoping en alerta por el poder vigorizante de la célebre pócima del druida Panorámix.