Fotograma de 'Better Man', 'biopic' de Robbie Williams.

Fotograma de 'Better Man', 'biopic' de Robbie Williams.

Cine

'Better Man': Robbie Williams se transforma en mono para contar su arduo viaje de la oscuridad hacia la luz

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Digamos que Better Man, como biopic musical, no dista mucho de otras biografías estrenadas recientemente sobre estrellas del pop y del rock con su ya habitual arco narrativo de éxito fulgurante, caída vertiginosa y redención final salvo por un detalle muy importante, y es que en esta ocasión el protagonista principal está interpretado por un mono.

Dentro del mundo del show-business se dice que la evolución de tu personalidad queda congelada en el momento en el que eres alcanzado por la fama. Pues bien, en el caso del particular e irreverente showman Robbie Williams, ese instante fue a la temprana edad de 16 años cuando el éxito llamó a su puerta nada mas entrar en la exitosa boyband Take That y que le marcaría para el resto de su vida.

El filme, que se estrena este 1 de enero en salas cinematográficas, narra el viaje personal del músico y cantante Robbie Williams —personaje indiscutible de la cultura pop de los últimos 30 años, amado y denostado a partes iguales—, arrancando desde su infancia, donde el amor por su abuela y el vacío que dejó un padre ausente que intentaba sin fortuna hacerse un hueco en el mundo musical, le hicieron soñar con convertirse en alguien importante dentro del mundo del espectáculo tal y como ocurriría años después.

Pero también ese desesperado anhelo de éxito traería consigo unas amenazas constantes de depresión y adicción en el futuro, convirtiendo su posterior y exitosa carrera en solitario en una inevitable montaña rusa provocada por numerosas presiones, inseguridades y un sorprendente síndrome del impostor mientras a la vez era capaz de llenar estadios por todo el mundo.

Su cínico sentido del humor y su tremenda capacidad para navegar entre las inestables aguas del mundo del espectáculo están muy presente en prácticamente todos los fotogramas de la valiente ‘Better Man’ revelando una particular crónica personal de su arduo viaje desde la oscuridad hacia la luz y aportando una reflexión desde la posición de alguien que ha conseguido sobrevivir a semejantes mareas y en pos de un objetivo claro a lo largo de su existencia: poder convertirse, pese a todo, en un hombre mejor.

Mono de feria

Curiosamente la idea de la película surgió casi por accidente tal y como relata su director, el australiano Michael Gracey (El Gran Showman, 2021): "Soy un gran admirador de la gente que tiene un don para contar historias, y en mi amistad con Robbie no sólo descubrí que era un narrador nato, sino que también tenía algunas historias realmente sorprendentes de su ascenso a la fama, pero lo que era realmente interesante era la forma en que las contaba. Es muy bueno recordando los detalles", y añade: "Y sin saber muy bien lo que estaba haciendo, decidí ir grabándolas en audio mientras poco a poco comenzaron a formar la base para la que después se convertiría en el biopic de su vida".

Pero Michael Gracey también sabía que un enfoque cinematográfico convencional se quedaría corto para retratar a un bufón moderno de la talla de Robbie y defendió desde el principio contar la historia de manera diferente mostrando al artista como siempre se había visto a sí mismo: un mono de feria dispuesto constantemente a subirse al escenario para entretener al público.

Tal y como confiesa el cantante británico: "Mi vida siempre parece un acto en la cuerda floja sin red de seguridad", recuerda Williams. "Podría caerme en cualquier momento y muchas veces lo hago. Así que cuando Michael vino a casa y me dijo: 'Vamos a hacer que seas un mono', al instante sentí que era la mayor apuesta que podíamos hacer por esta película. Me encantó que corriera ese riesgo tan diferente y para mí tenía todo el sentido del mundo. Cuando te rindes a la maquinaria de la industria, te obliga a ser un robot o un mono y yo elegí ser un mono."

Es bien sabido que las estrellas del rock pueden cambiar la energía de una sala, haciendo que todo orbite a su alrededor, y el cineasta no tardó en descubrir que el mono en pantalla podría proporcionar esa misma intensidad cautivadora, "Cuando pones un mono en una escena, no puedes evitar sentirte intrigado por él, incluso aunque no esté hablando, explica Gracey, y eso creo que capta lo que es ser una estrella. No puedes apartar los ojos de esa persona".

Sin duda, un recurso audaz y diferente que, además, ha permitido contar con la propia voz del mismo Robbie a lo largo de la película, tanto en sus diálogos como en la voz en off narrativa de la historia, y de la que se han utilizado muchas tomas provenientes de esas primeras grabaciones originales, directas e informales que ambos realizaron cuando el proyecto aún estaba en ciernes.

Para conseguir ese realismo por medio del CGI el propio Williams fue escaneado y sus movimientos capturados digitalmente por el equipo de Wētā FX (responsable de producciones como El señor de los anillos y El origen del planeta de los simios) de tal manera que la producción pudiera tener referencias reales de sus expresiones faciales, gestos y movimientos en escena.

There's No Business Like Show Business

Nacido en Stoke-on-Trent, en el norte de Inglaterra, Robbie Williams entró en el mundo del espectáculo de la mano de la boyband Take That a principios de los años noventa. Un proyecto inicialmente concebido para entretener al publico gay que rápidamente dio un giro de 180 grados al triunfar de manera descomunal e inesperada entre el público femenino.

Un éxito que sin embargo no aplacaba las maneras militares y tiranas de su manager Nigel Martin-Smith impidiendo a sus componentes tener relaciones sexuales para dar la impresión de estar "siempre disponibles" para las fans. Siendo el miembro más joven de la banda, Robbie nunca fue tomado en serio como compositor mientras veía como el líder del quinteto Gary Barlow se compraba una mansión a base de royalties mientras Williams seguía viviendo con su madre y su abuela en el mismo barrio obrero.

De tal manera que tras cuatro años de éxitos, coreografías incómodas sobre todo tipo de escenarios e innumerables discusiones internas para tener un papel más protagonista y compositivo dentro de la banda, en 1995 fue invitado amablemente a abandonar la formación. Robbie aceptó con reproches, pero también se sintió liberado en parte y dispuesto a embarcarse en una carrera en solitario en la que nadie parecía creer a su alrededor más que él.  

Eso si, cuando se mudó a Londres no tenía un plan definido mientras vagaba de fiesta en fiesta y con una resaca constante a cuestas pero, afortunadamente, en su camino se cruzó el músico y productor Guy Chambers inaugurando una colaboración musical que duraría muchos años.

Su álbum de debut Life Thru a Lens, que salió a la venta el año siguiente, le llevó directamente al número uno. Su magnética personalidad y su particular sentido del espectáculo para contar historias a través de la música quedaron reflejadas en las canciones del disco, mientras su primer gran éxito "Angels" era coreado por seguidoras a lo largo de todo el planeta. Además, las tablas adquiridas durante los años anteriores revelaron a un incontenible animal de escenario capaz de cautivar audiencias femeninas por todo el mundo. Su single "Let Me Entertain You" no podía ser más clarificador. 

Pero en un momento en el que ninguna industria prestaba atención a la salud mental y mucho menos la musical, Williams comenzaba a entrar en una espiral de alcohol y drogas luchando contra una ansiedad paralizante provocada por su temprano salto al estrellato mundial cuando aún era un adolescente. Demasiado para digerir en tan poco tiempo por alguien que acababa de cumplir 21 años y al que las presiones externas comenzaron a destrozarle psicológicamente pese a estar disfrutando del éxito con el que había soñado durante toda tu vida.

El mundo es un musical

Better Man como buen biopic musical con voluntad transgresora rinde indefectible homenaje a obras maestras del pasado como All That Jazz y Cabaret para poder captar con detalle la dualidad de actuar ante el público, donde la alegría y el dolor coexisten y se retroalimentan.

De tal manera que, en su fulgurante primera hora de metraje, el espectador asistirá a un frenético espectáculo pop sobre el mundo del espectáculo que alcanza su máximo esplendor con un magnífico, larguísimo y vertiginoso número musical que transcurre en Picadilly Circus (y con más de 500 extras) al ritmo de la popular Rock Dj que acabará inevitablemente dejando al espectador clavado en su butaca.

Fotograma de 'Better Man'

Fotograma de 'Better Man'

Lástima que la intensidad y las sorpresas de tan arriesgada propuesta se vayan difuminando en una segunda mitad que, inevitablemente, se queda más estancada y con una estructura mas reiterativa donde la extensa duración del filme acaba pasando factura.

En el centro dramático de la película está la hermosa pero complicada relación personal de Robbie Williams con su padre, el artista Peter Conway (Steve Pemberton), así como las relaciones estrechas y cálidas con su madre Janet (Kate Mulvany), su abuela Betty (Alison Steadman) y el matrimonio fallido que tuvo con la cantante de la girlband de moda en aquel momento Nicole Appleton (Raechelle Banno) de All Saints.

Pero en esta particular versión de su vida, el cinismo habitual y el inherente sentido del espectáculo de Robbie Williams se mantienen intactos y hay que reconocer que sus luchas y fracasos reciben a lo largo de la trama la misma atención, si no más, que sus triunfos.

De hecho su protagonista admite no estar seguro de donde le viene la compulsión para ser igual de abierto sobre lo bueno que sobre lo malo, y que a estas alturas de su vida ha dejado de cuestionarlo: "Para esta película, he revelado mucho más de lo que debería", dice entre risas Robbie. "Pero en el día a día también revelo mucho más de lo que debería sobre lo que ocurre en mi vida."

El artista británico, que precisamente actuará este verano en Barcelona dentro de la gira Robbie Williams Live 2025, prefiere describir la historia de su existencia como la de "un hombre ordinario al que le ocurren cosas extraordinarias". Dice: "Pero lo que he conseguido hacer, lo que he logrado y lo que he superado es el equivalente a estirar una banda elástica desde Stoke-on-Trent hasta Marte. Todo el mundo tiene un viaje de héroe, es parte de la experiencia humana. Solo espero que el mío, en particular, interese a la gente. Y los musicales son poderosos por su naturaleza transformadora y la cualidad etérea que tiene la música".