Laura Belloso: "Hay tantas series que cuesta encontrar un concepto que llame la atención"
Estrena 'El Internado Las Cumbres', 'reboot' de la serie que lanzó al estrellato a Ana de Armas y Blanca Suárez, en la que se libera del yugo del 'prime time' con un tono más adulto
19 febrero, 2021 11:28Diez años después de la emisión del último capítulo de El internado, llega a Prime Video un reinicio de la serie que lanzó al estrellato a Ana de Armas o Blanca Suárez. Y lo hace con Laura Belloso de nuevo al frente, que nos habla en esta entrevista de los cambios que ha experimentado el formato en su nueva casa. “Creo que nos ha salido una serie muy adictiva y muy apetecible”, opina la showrunner. “Es divertida de ver, promete mucho desde el principio, te mantiene en tensión y permite entablar una relación emocional con los personajes, que es lo que ya ocurría en la anterior versión”.
El Internado Las Cumbres, que se estrena simultáneamente en más de 200 países y territorios, transcurre en un centro ubicado junto a un antiguo monasterio, situado en un lugar inaccesible entre las montañas, aislado completamente del mundo. Los alumnos son chavales rebeldes y problemáticos que viven bajo la estricta y severa disciplina impuesta por el centro que les prepara para la reinserción en la sociedad. El bosque circundante alberga antiguas leyendas, amenazas que siguen vigentes y que les sumergirán en aventuras trepidantes y terroríficas.
En el reparto encontramos a una nueva generación de prometedores actores, como Asia Ortega, Albert Salazar, Daniel Arias, Daniela Rubio o Claudia Riera, acompañados por veteranos como Natalia Dicenta, Ramiro Blas, Alberto Amarilla y Mina El Hammani.
Pregunta. ¿Estamos ante una continuación de El internado o se trata de otra cosa?
Respuesta. Nosotros lo llamamos reboot, que consiste en utilizar el mismo concepto pero para hacer una serie completamente diferente. Estamos en otro internado, con otros personajes... El cameo de Yon González y Blanca Suárez no es más que un pequeño regalito que ofrecemos a los nostálgicos fans de la original, pero no necesitas haber visto aquella para engancharte a Las cumbres. Es una historia completamente diferente.
P. ¿Cómo surgió la idea de este reboot?
R. Es una iniciativa de Laura Fernández, de The Mediapro Studios, y de Sonia Martínez, de Buendía Studios, que son los dueños de la franquicia. Para mí fue una gran sorpresa que quisieran volver a hacerla. Ahora hay tantísimas series en cada plataforma que creo que cuesta encontrar un concepto que pueda llamar la atención de los espectadores. El Internado Las Cumbres juega con ese sentimiento tan poderoso que es la nostalgia, que creo que fue el motor inicial para este reinicio. Pero al final estamos ante una serie completamente nueva, aunque habrá muchas cosas que les resonaran a los que vieron la antigua.
P. ¿Cuál es el sello que distingue a El internado que querían conservar?
R. Pues nos encontramos nuevamente ante una serie de misterio que tiene el mismo concepto de fondo: un colegio, que en teoría está dedicado a algo positivo como es educar y preparar a adolescentes para afrontar el mundo, que oculta terribles secretos. Eso ocurría en la anterior versión y en esta también, pero ahora el internado es más hostil porque se trata de un colegio para niños problemáticos, el lugar con el que te amenazan tus padres cuando te portas mal. Los adolescentes tienen que enfrentarse a un peligro que es mucho más grande que lo que puede gestionar gente de su edad.
P. Quizá el gran cambio es que ahora los capítulos son de 50 minutos...
R. Hay varios factores que han hecho que este El Internado Las Cumbres sea diferente, y uno de ellos es la duración. Antes los capítulos llegaban a 70 minutos y esto nos obligaba a que la serie fuera muy coral y tuviera muchas historias desarrollándose en paralelo. Con los 50 minutos podemos afinar el tiro y que la trama esté mucho más clara. Es muy gratificante para los que escribimos la serie porque podemos centrarnos en unos personajes protagonistas y en un tema concreto. Además, antes estrenábamos los capítulos en prime time una vez a la semana y esto nos obligaba a escribir para gustar a todo el mundo y sentar a toda la familia frente al televisor, mayores, medianos y pequeños. Ahora ya no es así, aunque nuestro objetivo siempre es y será gustar al mayor número de espectadores posibles, pero buscamos cumplir ese objetivo desde otro lugar.
P. ¿Esto les ha proporcionado mayor libertad a la hora de crear los personajes y las tramas?
R. Hemos intentado que los personajes fueran muy realistas, sin inspirarnos ni en otras series de adolescentes ni en lo que habíamos hecho antes. A pesar de que son jóvenes que viven apartados del mundo, en un sitio aislado en el que no tienen redes sociales, queríamos que fueran muy identificables con chavales actuales.
P. ¿Ha sido complicado encontrar a los actores que tomaran la alternativa de la primera generación?
R. Hemos peinado toda la península buscando a los actores de la serie. Nos hemos puesto el listón muy alto porque todo el mundo recuerda el fenómeno que se produjo en torno a los intérpretes de El internado original, que cuando empezó eran unos jovencitos que no habían hecho casi nada y que fueron creciendo a lo largo de los capítulos hasta convertirse muchos de ellos en estrellas. Incluso tenemos a Ana de Armas triunfando en Hollywood. Hemos tratado de emular aquello con Luis San Narciso y su equipo, que hicieron el primer casting y también han estado involucrados en este, y creo que han hecho un trabajo estupendo. Tenemos como protagonista a Asia Ortega, que es una actriz que va a dar mucho que hablar porque además de ser una belleza es una actriz buenísima, con mucho carisma.
P. El internado en sí mismo es casi un personaje más de la serie. ¿Cómo dieron con él?
R. Queríamos que el internado fuera un antiguo monasterio medieval, para que ya nos estuviera contando y sugiriendo por donde queríamos llevar la historia. Hicimos un casting de monasterios por toda la península y al final elegimos el de Irache, que es un edificio imponente. El problema es que no nos venía bien el entorno así que lo reubicamos gracias a la magia del cine al borde de un acantilado y rodeado por las cumbres nevadas que dan el nombre al lugar. Y por debajo un bosque, el de Artikutza. Los platós los diseñaron el equipo de Mikel Serrano en San Sebastián, que dan continuidad al exterior. En estos escenarios hemos rodado los ocho capítulos.
P. ¿Qué se puede decir del misterio que rodea a la serie?
R. La historia tiene que ver con una logia medieval, la logia del nido del cuervo, cuyos miembros se enmascaraban como los médicos de la peste. Es todo inventado, pero bebemos de cierto imaginario común y de historias que hemos leído. Guardando las distancias, nos inspiramos en El nombre de la rosa y en relatos de misterio que tienen que ver con la religión, con la lucha entre el bien y el mal, con las brujas… Estos lugares en los que hemos rodado también nos inspiraron mucho. Por ejemplo, el bosque de Artikutza es uno de esos lugares en los que sientes un escalofrío en cuanto te adentras en él, a la vez bello y umbroso. Pero hemos tratado de ser originales y no teníamos en mente ninguna serie o película mas allá de la que te he mencionado.
P. ¿Habrá más temporadas?
R. Nos encantaría, claro que sí. Pero depende de la respuesta del público. Nosotros tenemos muchas ideas para continuarla.