Escenarios

Beckett en el Canal

14 enero, 2011 01:00

Escrita en inglés, frente al francés utilizado para Esperando a Godot, y poco después de La última cinta, tras la petición de su mujer de que creara una obra alegre, Los días felices es uno de los textos de Samuel Beckett que más ha cambiado con el tiempo. Y es que, a pesar de la petición de su esposa, los asistentes a las primeras funciones salieron con el convencimiento de que acababan de ver una tragedia pesimista donde no había ningún tipo de esperanza.

La percepción ha cambiado con los años. Los días felices no es una obra que puede considerarse el súmmum de la alegría. Pero sí es un texto donde destaca el optimismo y la esperanza de su protagonista -omnipresente en el escenario- sin que le importe demasiado la complicada situación en la que se encuentra. Isabel Ordaz interpreta a la sorprendente Winnie y Julio Vélez a su esposo Willie.

Y es que Los días felices plantea la circunstancia que rodea la vida de una mujer enterrada hasta la cintura en la duna de un desierto -durante el primer acto- y hasta el cuello en el segundo, mientras su marido piensa en el sexo. Allí habla sin parar, "encontrando la voluntad de vivir ", señala Salva Bolta, director de un montaje que podrá verse hasta el 23 de enero en los Teatros del Canal de Madrid.