Alberto San Juan en una escena de la obra

Acostumbrado a verle en ‘shakespeares' de compañías inglesas, sobre todo en la de Cheek by Jowl, más de un aficionado al teatro puede llevarse una sorpresa cuando lea el nombre de Will Keen en el cartel de Traición junto con los de Alberto San Juan y Cecilia Solaguren. Se estrena esta noche en la sala pequeña del Español de Madrid. Pero no, no es un error ni la obra de Harold Pinter va a representarse en inglés. Por el contrario, lo será en castellano, idioma que el actor británico, casado con una española y residente en el país, domina y con el que debutó en escena hace cuatro años con Cuento de invierno.

Desde entonces, Keen no ha dejado la escena nacional. Ya sea como director y profesor en talleres o como actor, ahora, en la obra del Premio Nobel de Literatura. Aunque, puntualiza, interpretando a "un inglés" en un montaje trasladado a la España de los años 80, ya que ve "imposible" que pueda encarnar a un personaje español.

La obra de Pinter, en una primera lectura, es la historia de un adulterio. Con la diferencia de que el autor la cuenta al revés, empieza por el final y retrocede hasta el principio, cuando dos amigos -interpretados por Keen y San Juan- comparten ilusiones con la mujer del primero (Cecilia Solaguren). Tras ese primer estrato argumental, que Pinter escribió en 1978, hay una historia más profunda: la de la renuncia de los tres personajes a las ideas que les movían de jóvenes. "Aunque nunca fueron unos revolucionarios, sino unos burgueses, sí es cierto que con el paso de los años han cambiado poco a poco, sin darse cuenta, hasta traicionarse a sí mismos", explica Keen. Y de una manera que no admite vuelta atrás, porque "nunca es posible empezar de nuevo, por mucho que se quiera", continúa el actor, que está entusiasmado con la versión que la directora Marta Fernández-Ache ha hecho de un texto "difícil, intenso y que es puro verso".

Después de Traición, Keen regresará a Inglaterra, un país que vive "un momento político y social terrible", asegura. "No me gusta lo que pasa, me deprime estar allí, pero sigo adorando trabajar en su teatro", corrige enseguida. Luego volverá a Madrid, donde le espera la dirección de un Hamlet que encabezará también Alberto San Juan.