La Filarmónica de Londres abre el Festival de Música de Canarias
Músicos de la Filarmónica de Londres. Foto: Benjamin Ealovega.
El pianista Iván Martín será el encargado de inaugurar hoy la 29ª edición del Festival de Música de Canarias. La Orquesta del Teatro Mariinsky de Valery Gergiev y la Filarmónica de Londres de Vladimir Jurowski serán los grandes reclamos de una programación abierta a los nuevos públicos en la que no faltarán las actuaciones de la Sinfónica de Tenerife, dirigida por Michal Nesterowicz, y la Filarmónica de Gran Canaria de Pedro Halffter.
En 2007 Vladimir Jurowski (Moscú, 1972) sustituyó a Kurt Masur al frente de la formación londinense, que está considerada una de las mejores fábricas de sonidos del mundo. "No es habitual encontrar tanta personalidad y carácter entre las orquestas británicas, que al estar autofinanciadas siempre andan pendientes de la cuenta de resultados". Asegura Iván Martín que este Schumann ha requerido varias horas de ensayo pero, sobre todo, largas conversaciones con el maestro ruso, hijo del mítico Mikhail Jurowski. "Es una suerte haber dado con una batuta capaz de comprender la complejidad técnica y formal de esta partitura. Algunos directores reclaman su espacio en el podio y asfixian al intérprete. No es el caso de Jurowski, que conoce muy bien el universo schumanniano, que está lleno de trampas". Quizá porque el compositor alemán albergaba multitudes. "Investigaciones posterio- res han demostrado que padecía un trastorno maniaco-depresivo. De ahí que empleara diferentes personalidades para componer: el ardiente y dionisiaco Florestán, el fantasioso Eusebio y el sabio Maestro Raro. Todos para uno y uno para todos".
El Concierto para piano y orquesta en la menor es toda una singularidad. "No fue concebido originalmente como concierto, sino como una fantasía dedicada a Clara Schumann". Cuatro años después, Robert Schumann la revisó y le añadió dos movimientos que le confirieron una estructura que él mismo definió como algo entre el concierto, la sinfonía y la gran sonata. "Sin embargo, su obsesión por el ideal romántico de la obra de arte total hace que todo tenga unidad". La biografía de Clara Schumann le ha ayudado a desvelar algunos otros misterios del Concierto. "Casualmente Clara, que fue compositora en una época en que las mujeres no eran reconocidas como tales, tiene otro Concierto para piano que guarda no pocas similitudes con el de su marido. La pregunta es: quién inspiró a quién".
La London Philharmonic tiene muchos más atriles que la Gewandhaus de Leipzig que estrenó el Concierto de Schumann en 1946. "La forma de entender la música ha cambiado mucho desde entonces. La manera en que un forte de Beethoven sobrecogía al público de una sala de trescientas butacas nada tiene que ver con los aforos y las sensibilidades de hoy en día. Con esto quiero decir que el aumento de volumen está perfectamente justificado".
El nombre de Iván Martín empezó a sonar en 2010 con motivo de una grabación de las sonatas de Antonio Soler, uno de los grandes compositores españoles del siglo XVIII. A fin de continuar con la labor iniciada en su día por Alicia de Larrocha y que más tarde han venido completando Isidro Barrio o Joaquín Soriano, Iván Martín llevó a cabo un exhaustivo trabajo de investigación en las fuentes originales conservadas en la Biblioteca de San Lorenzo de El Escorial y en el Monasterio de Montserrat. "Me interesa la música en todo su contexto. Saber de dónde viene cada nota". Hasta el punto de que cuando Antón García Abril le dedicó una obra, no descansó hasta lograr sentarse en el piano en que había sido compuesta la partitura en cuestión. "Había ciertas sonoridades que no entendí hasta que palpé aquellas teclas... Siempre digo que el piano es el instrumento más imperfecto de todos. Su sofisticación técnica hace que ocurran mil cosas entre la acción de pulsar una tecla y el resultado sonoro". A la grabación de Soler le siguió otra, en la que rescataba algunas obras de piano de Mozart, con el que se terminó de ganar el favor de la crítica.
Conciertos de calle
En la segunda parte del concierto (que se repetirá el 14 de enero en Gran Canaria), los filarmónicos londinenses abordarán la Sinfonía n° 5 de Mahler. En su segunda intervención (mañana en Tenerife y el domingo en Gran Canaria) interpretarán la Obertura Trágica de Brahms, el Concierto para violín n° 2 de Prokófiev (junto a la solista rusa Patricia Kopatchinskaja) y la Sinfonía n° 5 de Tchaikovsky. "Tres décadas después de que Rafael Nebot fundara el certamen, las Islas siguen acogiendo el único festival de invierno de este calibre, por el que siguen pasando las mejores orquestas, directores y solistas del mundo".Su directora desde 2010, Candelaria Rodríguez, no ha escatimado en grandes nombres en una edición que está diseñada desde la austeridad. "Le ha tocado un momento complicado, pero está demostrando que, con muchos menos recursos, se pueden seguir haciendo grandes cosas. Y ha conseguido saldar una asignatura pendiente: abrir el Festival a los teatros y a la calle". Por eso, además de en los Auditorios capitalinos y los Teatros Guimerá, Pérez Galdós y Guiniguada, la programación se desarrollará hasta el 15 de febrero a lo largo de 38 conciertos en otros escenarios de las ocho Islas, incluida La Graciosa.
La insaciable curiosidad
En el resto de la programación sinfónica, la primera de las orquestas locales en pisar los escenarios del Festival será la Sinfónica de Tenerife, dirigida por su nuevo titular Michal Nesterowicz. El programa estará dedicado a Mahler, con la ejecución de su Sinfonía n° 2 ‘Resurrección' junto a la Coral Reyes Bartlet, el Coro de Cámara de Tenerife y las voces de la soprano tinerfeña Raquel Lojendio y la mezzo Iris Vermillion. Por su parte, la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria, a las órdenes de Pedro Halffter y con el tenor Jorge de León, ofrecerá la Sinfonía Fausto de Liszt.Entre concierto y concierto, Iván Martín saca tiempo también para componer y va a publicar una edición crítica de las partituras mozartianas de su último disco. Le puede la curiosidad. Por eso con frecuencia le preguntan por su otra vocación, la de director de orquesta, que no disimula, aunque prefiere tomárselo con calma: "El músico que niegue llevar un pequeño director dentro miente. De momento a mí la batuta me tienta lo justo. Creo que porque soy muy autocrítico y tengo un gran respeto por los directores".
En las próximas semanas seguirá trabajando en un ambicioso proyecto discográfico de Sony en el que figuran el compositor Michael Nyman y la Orquesta Sinfónica de Castilla y León. "Sólo puedo decir que será la primera de una serie de colaboraciones que van a dar mucho que hablar". En los blancos que le quedan en la agenda, seguirá curtiéndose con los músicos del Galdós Ensemble.
El Emerson Quartet será la formación que abrirá, el 21 de enero en el Teatro Pérez Galdós de Las Palmas, los conciertos del apartado camerístico. Tomarán el relevo el Cuarteto Brentano, Europa Galante en manos de Fabio Biondi, la Orquesta de Cámara Checa y la Camerata de Salzburgo, dirigida por Ariel Zuckermann, que contará con la presencia de Martin Grubinger en la percusión, una sección poco habitual como solista que cobra toda su dimensión en las manos del músico austriaco.
La 29 edición del certamen dará continuidad al Festival Joven, con el objetivo de seguir abriendo paso a las nuevas generaciones de músicos, pero también de público. "Es importante que la música no pierda ese vínculo estrecho con la calle que hace que una sinfonía o un concierto de piano sigan desempeñando un papel fundamental en la educación y la sensibilización de la gente", continúa Iván Martín.
Por eso, además del concierto en clave familiar que ofrecerá la Camerata de Salzburgo, está prevista una serie de conciertos a cargo de los jóvenes ganadores del último Concurso Infanta Cristina de Piano y se proyectarán varias películas cuyas temáticas giran en torno a la música clásica, sus grandes títulos, intérpretes y compositores. "No podemos olvidar que el futuro de la música clásica se decide más en este tipo de actividades que en las partidas presupuestarias".
Las huestes de gergiev giran por España
Vienen Valery Gergiev y los músicos de la Orquesta del Teatro Mariinsky de San Petersburgo de oficiar (ayer) el debut de Anna Netrebko en el Liceo de Barcelona a propósito de una versión de concierto de la Iolanta de Tchaikovsky. Esta tarde, el maestro osetio proseguirá con su gira por España, que recalará en los Auditorios de Barcelona, Gerona, Madrid y Alicante (11, 12, 14 y 15 de enero, respectivamente), el Liceo (para una función más de Iolanta el día 13), el Teatro Principal de Vitoria (16), el Teatro Campoamor de Oviedo (17) y, dentro de la programación del Festival de Canarias, los Auditorios de Santa Cruz de Tenerife (19) y Alfredo Kraus de Las Palmas (20).
"Hace veinte años que dirijo regularmente en España -cuenta Gergiev a El Cultural- y puedo decir que conozco bien al público. Sé que, a pesar de las dificultades, las salas de concierto seguirán estando llenas porque, como en mi país, la música es el oxígeno de la sociedad. La prueba está en el nuevo ciclo de conciertos [La Filarmónica] en el que vamos a participar en Madrid". Le acompañarán los pianistas Alexei Vorodin, Jorge Luis Prats, Enrique Bagaria y Denis Matsuev, la violonchelista Marie-Elisabeth Hecker y el clarinetista Cristo Barrios. Abordarán un programa colosal, que va de la Quinta de Tchaikovsky a la Décima de Shostakóvich pasando por el preludio de Lohengrin y el Concierto para clarinete n° 2 del canario Nino Díaz. "España es una cantera de talento. Entre Frühbeck de Burgos y Pablo Heras-Casado hay varias generaciones de intérpretes, directores y compositores de primer nivel".
Al frente de una de las instituciones musicales más antiguas de Rusia, Gergiev ha sabido defender desde 1988 las especificidades interpretativas del repertorio patrio sin dejar de abrirlo al mundo. "Creo que una de las grandes cualidades de la Orquesta del Teatro Mariinsky, que durante años ha mantenido una estrecha relación con los grandes compositores rusos, es que todo el mundo reconoce su sonido inmediatamente. Es una mezcla de técnica, sensibilidad y tradición".