Cultura pondrá coto a la reventa lucrativa de entradas
A raíz de un informe, el ministerio de José Guirao quiere imponer medidas como el carácter nominativo de las entradas a grandes conciertos
30 octubre, 2018 01:00Imagen promocional de la gira de Ed Sheeran
Robots que compran cientos de entradas por minuto, localidades agotadas en un instante y reventa a precios desorbitados en plataformas digitales como Viagogo, Stubhub o Seatwave, que suelen escudarse en el hecho de que solo son intermediarias entre vendedores y compradores y que por tanto no deciden el precio de las entradas. Ante esta práctica, el fan de a pie que quiere asistir a los conciertos más cotizados tiene poco que hacer, y lo lleva sufriendo bastante tiempo. En España, Alejandro Sanz anunció en febrero de 2017 la creación de la Alianza Anti-Reventa, en la que participan diversos artistas y entidades del sector de la música en España, y también el Ministerio de Cultura decidió tomar cartas en el asunto encargando la realización de un informe previo con el objetivo de adoptar medidas legales contra esta práctica abusiva.El contenido del documento se ha hecho público este martes después de la reunión de la Conferencia Sectorial de Cultura (de la que forman parte el ministerio y las consejerías de cultura de las comunidades autónomas), a la que se ha invitado por primera vez al Ministerio del Interior. El Ministro de Cultura, José Guirao, ya anunció la semana pasada en la Comisión de Cultura y Deporte del Senado que, siguiendo las recomendaciones del informe, en el que han participado las propias plataformas donde se realiza la reventa de entradas (el "mercado secundario"), no se adoptarán "medidas radicales". Es decir, que no se prohibirá completamente la reventa telemática, pero sí se pondrán limitaciones.
Tras la reunión de este martes, el ministro ha reconocido que la actual normativa aplicable a la reventa de entradas es "insuficiente, fragmentaria y confusa", y por medio de una ley o un decreto-ley se prohibirá la reventa "habitual" y lucrativa y se instará a los promotores de grandes conciertos a emitir entradas nominativas, una práctica que ya se está llevando a cabo en algunos casos. Se trata de entradas asociadas a la identidad del comprador, por lo que solo pueden acceder al espectáculo la persona que adquirió las entradas a través del canal de venta oficial y sus acompañantes. El ministro ha señalado que este tipo de medidas ya se están llevando a cabo en países como Francia, Bélgica y también en la comunidad autónoma de Galicia.
La comisión de estudio de la Conferencia Sectorial que se ha encargado de realizar el informe ha detectado numerosos problemas relacionados con la reventa. Entre ellos, el más evidente es "la disponibilidad de las entradas a través de los canales oficiales de venta y los elevados precios que pueden alcanzar las entradas en la reventa", informa el ministerio, debido a "la actividad de los vendedores habituales (llamados brokers o prosellers), que utilizan diversas técnicas para ocupar la práctica totalidad de los canales de venta on-line con prioridad frente al consumidor", pero también, y esto resulta incluso más grave, "el desvío de entradas" desde los canales de venta oficiales hacia los canales de reventa. A esto hay que sumar la falta de "información precontractual" que hace que los compradores a menudo no sepan si se encuentran en un canal de venta o reventa, ni cuál era el precio original de las entradas, así como habituales casos de fraude y falsificación de entradas e incluso la dificultad de garantizar la seguridad de los asistentes a los conciertos al no poder "debido a la falta de trazabilidad del número de las entradas una vez que se produce su distribución a través de las plataformas de reventa telemática, lo que dificulta hacer una previsión de riesgos en acontecimientos de congregan a multitudes".
De los robots a la reventa ética
Entradas.com es la principal compañía española de venta de entradas online. Según sus datos, los robots de compra usados por los reventas son capaces de adquirir 430 entradas en un minuto y medio y garantizan el 20 % del aforo de los espectáculos a las webs de reventa. Aunque la compañía asegura invertir recursos continuamente en técnicas para evitar la compra masiva, reconoce que en muchos casos es difícil detectarla, y aboga por luchar contra el fraude "mediante el esfuerzo conjunto de las autoridades y la industria de espectáculos culturales", señala la empresa en un comunicado. Entre las medidas que propone, destaca la "regulación para la "reventa ética", exigiendo a la plataforma vendedora garantías sobre la autenticidad de la entrada; permitiendo al promotor fijar el posible margen máximo para evitar la especulación, y regulando que la actividad se realice efectivamente entre particulares y sin un interés de enriquecimiento".Ante la creciente presión del sector musical y de la opinión pública en todo el mundo, algunas plataformas de reventa especulativa están deponiendo las armas. Al menos, en apariencia. Es el caso de Seatwave, la plataforma de reventa de Ticketmaster, la mayor empresa de ticketing del mundo. Como anuncia la cabecera de la web, próximamente los usuarios podrán revender sus entradas directamente en Ticketmaster a su precio original o inferior. Pero aunque la compañía proclama públicamente su lucha contra la reventa, una investigación llevada a cabo por periodistas canadienses de CBC y Toronto Star, que se hicieron pasar por reventas en un congreso sobre música en directo en Las Vegas, apunta en la dirección contraria: según su testimonio, Ticketmaster no solo no está luchando realmente contra la reventa especulativa, sino que incluso pone a su disposición una app llamada TradeDesk. Por este motivo, la compañía acaba de recibir una demanda colectiva en California. También hace dos años se produjo otro escándalo cuando el responsable italiano de Live Nation (la mayor promotora de conciertos del mundo y dueña de Ticketmaster) reconoció que la empresa desviaba directamente buena parte de las entradas a su propia web de reventa, la citada Seatwave.