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¿Quién teme a la música del siglo XX?
(II) Ingo Metzmacher piano
7 marzo, 2001 01:00
EMI lanza el segundo volumen de lo que podríamos llamar "contemporáneos fáciles" o "el siglo XX para ti". Una selección hecha para encontrar música sencilla, fácil de disfrutar y a ser posible ruidosa, pero no logra mucho porque se selecciona lo que ya tiene hueco en el repertorio y se desmitifica lo que no está mitificado. No encontramos a Webern ni Xenakis, sino a Falla y Copland, cuando los primeros tienen música asequible: es cuestión de presentarla con tino.
En todo caso, este disco garantiza una hora de juerga musical y contiene estupendas versiones en directo de Metzmacher y la Filarmónica de Hamburgo. La Danza del fuego de Falla está tocada con brillantez técnica y suficiencia expresiva. Abundan los sones antillanos -en partituras de Bernstein, Gershwin, Daugherty y Antheil- y los paisajes sonoros: está el sonido-western del Rodeo de Copland, el sonido-ferrari de la Fast Machine de Adams, el sonido-AVE del Pacific 231 de Honegger y el sonido-fábrica de La fundición de Shostakovich y Stravinski. Entre este bullicio, los pasajes lentos de la Pavana de Ravel, Cenicienta de Prokofiev y el misterioso Verde de Takemitsu.
En todo caso, este disco garantiza una hora de juerga musical y contiene estupendas versiones en directo de Metzmacher y la Filarmónica de Hamburgo. La Danza del fuego de Falla está tocada con brillantez técnica y suficiencia expresiva. Abundan los sones antillanos -en partituras de Bernstein, Gershwin, Daugherty y Antheil- y los paisajes sonoros: está el sonido-western del Rodeo de Copland, el sonido-ferrari de la Fast Machine de Adams, el sonido-AVE del Pacific 231 de Honegger y el sonido-fábrica de La fundición de Shostakovich y Stravinski. Entre este bullicio, los pasajes lentos de la Pavana de Ravel, Cenicienta de Prokofiev y el misterioso Verde de Takemitsu.
