En este disco, titulado con el nombre de la pieza de Silvio Rodríguez que cierra el álbum, la soprano guipuzcoana se nos presenta bajo un prisma totalmente diferente al de una cantante de ópera tradicional. Ha escogido una serie de 13 temas conocidos -entre los que se encuentran hits como Tears in Heaven de Eric Clapton, Love me tender de Elvis Presley, Ne me quitte pas de Jacques Brel o Alfonsina y el mar de Ariel Ramírez-, que interpreta con un conjunto de músicos reunidos para este proyecto por el productor Javier Limón. La artista sale muy airosa de la confrontación con los grandes nombres que se han acercado a este repertorio, que ella aborda de una manera susurrante, con extremada elegancia, una impecable dicción en todos los idiomas y con un estilo absolutamente personal.