Josep Mir i Llussà (Solsona, 1701/1704-Madrid-1764) fue maestro de capilla de la Encarnación de Madrid. Compuso casi exclusivamente música religiosa. En este jugoso y revelador disco, que comenta documentadamente el musicólogo Josep Dolcet, aparecen cuatro composiciones muy distintas:
Misa a 8 en re mayor,
Stabat Mater en sol menor,
Quomodo oscurantum est y
Lauda Jerusalem. Una
muestra de la variedad de registros de un músico sabio, conocedor de la pequeña y de la gran forma, dominador de la armonía, de colores ya muy clásicos más que barrocos, y de una hermosa vena melódica. El solo de oboe, que dialoga con el tenor -un estupendo Lluis Vilamajó- de toque italianizante, es muy bello. La interpretación nos parece muy digna, llena de vida en lo rítmico y del excitante toque tímbrico de los instrumentos de época de Vespres d'Arnadí. Aunque no siempre el coro La Xantria está por completo empastado y afinado, se hace muy agradable este primer monográfico del compositor.