Image: Tomeo entra en escena

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Teatro

Tomeo entra en escena

La agonía de Proserpina, en Madrid

5 junio, 2003 02:00

Balbino Lacosta en escena

La agonía de Proserpina es la primera producción del Centro Dramático de Aragón que se ve en Madrid. Una adaptación de la novela homónima de Javier Tomeo que el propio autor ha adaptado para la escena. Se representa en La Abadía, a partir del 10 de junio, dirigida por el suizo Felix Prader.

"Una historia de amor imposible entre una inteligencia torturada y una simplicidad insondable". Así es como resume el director suizo afincado en París, Felix Prader, el tema del último relato de Javier Tomeo en subir a escena: La agonía de Proserpina. El título alude a la historia de la ninfa griega raptada por Plutón, condenada a vivir seis meses con él en los infiernos y otros seis en la tierra, por lo que se la considera diosa de los muertos pero también de la fertilidad de la tierra.

Como la relación imposible entre Plutón y Proserpina, Tomeo idea un diálogo entre un escritor y una joven en una calurosa noche de verano; un juicio a puerta cerrada en el que dos amantes de naturaleza bien distinta -el hombre es racional y la mujer instintiva- se ponen a prueba. Las discusiones que mantienen sirven para plantear diversas consideraciones: amor, fidelidad, deseo, pero también temores, odios, fantasmas, angustias y sirve para crear esos ambientes herméticos propios de Tomeo, donde la ambigöedad, la ironía y el lenguaje tejen una trama sobre la intimidad de la pareja.

Diálogos sin descripciones
Oscense de nacimiento, Tomeo ha sido el elegido por el recién abierto Centro Dramático de Aragón para representar la dramaturgia contemporánea de la región que la institución quiere promocionar. Aunque el autor no escribe propiamente textos dramáticos, los directores de escena encuentran su obra muy apta para la escena: su escritura se conforma en torno al diálogo, sin apenas descripciones, y es de pocos personajes a los que por lo general confina en ambientes misteriosos. En esta misma sala pudimos ver hace algunas temporadas Los misterios de la ópera, y precisamente Prader ha sido el director que más veces ha reincidido con Tomeo: montó El castillo de la carta cifrada en el Studio Théâtre de La Comedie Française (1997) y Amado monstruo en la Shauböhne de Berlín (1989). Ha sido Tomeo quien ha sugerido a Prader cuando el CDA le propuso llevar a escena esta obra, en cuya adaptación han trabajado los dos. "Esta vez Javier escribió él mismo una versión teatral de la novela. Una versión muy libremente inspirada en la novela. Hemos establecido juntos la versión final del texto. Para nosotros era una ocasión formidable para explorar las diferencias entre la libertad de un texto literario y las exigencias de un diálogo puramente teatral", sostiene Prader.

Los actores que dan vida a esta historia son Beatriz Ortega, en el papel de Anita, y Balbino Lacosta, para quien trabajar con Prader ha sido una difícil y exigente labor: "Ha sido una prueba psicológica bastante fuerte, ya que para él nada servía y había que cambiarlo constantemente", explica Lacosta.