Alternativos pobres, alternativos ricos

Corpos disidentes, por los Gallegos Nacional Nut Teatro

Ocho años hace que las salas alternativas madrileñas se dividieron en dos bandos: aquéllas que organizan el Festival Escena Contemporánea (EC) con la ayuda de la Comunidad de Madrid y las que participan en La Alternativa, el Festival convocado por la sala Triángulo sin apenas recursos. Mientras uno puede contratar compañías internacionales, el otro se conforma con reunir el teatro de aficionados "made in Spain". La CAM quiere que en 2009 haya un solo Festival, pero de momento, otro año más se celebran por separado pero casi en las mismas fechas: La Alternativa comienza hoy y EC el próximo 28 de enero.

Escena Contemporánea (EC) es la derivación de un Festival que originariamente organizaba una sala madrileña, la Triángulo que dirigía Alfonso Pindado en el madrileño barrio de Lavapiés. Pindado creó hace veinte años el Festival de Teatro Alternativo, conocido por La Alternativa, con la idea de reunir las producciones de compañías que se movían en el circuito "off". Al principio había reticencias por parte de otras salas a participar, pero cuando el Festival fue bendecido con subvenciones de la Comunidad de Madrid, el ánimo cambió y muchas se cobijaron a su sombra. Hace siete años, la que fue una iniciativa social independiente, acabó en una bronca entre las principales salas altenativas al exigir la Comunidad de Madrid transparencia con las cuentas. Se pidió a Pindado que cediera la gestión, se intentó llegar a un acuerdo con él, pero fue imposible y éste optó por volver a los orígenes: hacer La Alternativa sin ayudas públicas.

Hacia un solo Festival. Con el acuerdo de la Comunidad de Madrid, las salas alternativas Cuarta Pared y Pradillo, la Coordinadora de Salas Alternativas y la productora y distribuidora de espectáculos de pequeño formato Artemad crearon la asociación sin ánimo de lucro Escena Contemporánea, para organizar un Festival de nombre homónimo (Pindado tiene registrado el nombre de La Alternativa). No era arbitrario hacerlo a través de una asociación: es la personalidad jurídica adecuada para solicitar subvenciones oficiales a Festivales. Y es precisamente la falta de esa personalidad jurídica lo que impide a La Alternativa el acceso a las subvenciones. De esta manera, Escena Contemporánea cuenta este año con un presupuesto de 420.000 euros aportados por la CAM, mientras La Alternativa ha recibido tan solo 12.000 del Ministerio de Cultura.

Según explicó a El Cultural Cristina Santolaria, subdirectora general de Programación de Teatro de la CAM, "la Comunidad quiere resolver este asunto, lo razonable sería que en el año 2009 exista un solo Festival, pero para eso se tienen que poner de acuerdo las partes. Y creo que hay voluntad".

Respecto a las programaciones de uno y otro Festival, hay diferencias notables. Mientras EC puede invitar a compañías y artistas internacionales porque se lo pemite su presupuesto, La Alternativa debe contentarse mayormente con producciones nacionales de pequeñas compañías, aunque cuenta con la presencia del argentino Eduardo Pavlovski. Muy vinculado a la Triángulo, la estancia del argentino en el Festival se sufraga con un taller que el autor y actor impartirá. El primero se celebra en ocho salas madrileñas y en cinco municipios; el segundo en ocho "espacios" de la capital.

Relevo en la dirección de EC. La programación de Escena Contemporánea recae en un director nombrado por la Asociación que es renovado cada cierto tiempo. ésta es la última edición que diseña Roberto Cerdá, ya que el próximo año será sustituido por Paz Santa Cecilia (ex-codirectora de Valencia Escena Oberta).

No es fácil definir qué tipo de espectáculos tienen cabida en este Festival, pues muchos podrían encajar en otros Festivales que organiza la CAM. Javier García Yagöe, presidente de la Asociación y director de la Cuarta Pared, fue el primer director de EC y, en su opinión, este Festival debe "apostar por la creación contemporánea que suponga innovación, por grupos y compañías que quizá son novedosos o minoritarios ahora, pero que pueden acabar siendo aceptados en el futuro". Otras voces desde la Comunidad y de otras salas implicadas opinan que "es un Festival para aquellos creadores que investigan más allá de las fronteras habituales, que siguen una línea trasgresora".

Trasgresión e innovación son términos bien aceptados sobre todo por los medios de comunicación, pero también se trata de que el Festival tenga un eco social, que vaya público. Y ésto parece ser un asunto que ha preocupado a Cerdá: "Atraer la atención del público durante cuatro semanas es difícil y más en Madrid", escribe Cerdá en el programa del Festival, y continúa: "el Festival es el espacio idóneo para disfrutar de las propuestas más inquietantes y de los nuevos lenguajes escénicos, de forma que los jóvenes creadores junto a los artistas más experimentados conviertan Madrid en lugar de encuentro con el espectador".

Quizá por ello, la programación de Cerdá peque de poco arriesgada en lo que se refiere al capítulo nacional. La presencia de compañías experimentadas como Senza Tempo, Provisional Danza, Mariantonia Oliver o Erre que Erre estaría más justificada en un festival como Madrid en Danza o en las programas de Danza que periódicamente organizan las salas, aunque quizá no puedan pagar sus cachés. Tampoco los artistas que inauguran la muestra, Ajo + Masstretta, el día 28 en el Círculo, pueden llamarse innovadores o raros, son habituales de clubs y cabarets madrileños desde hace por lo menos un lustro. Sí despierta más interés el Centro de Artes Escénicas, integrado por los bailarines Isabel Vázque y Juan Luis Matilla y que, dirigido por Jordi Cortés, actúan por primera vez en Madrid con Yo cocino y él friega los palatos, con música de John Cage interpretada por el pianista Alejandro Rojas-Marcos.

Presencia del teatro de texto. En contraste con otras ediciones, lo que sí abunda en ésta es el teatro de texto. Consagradísimo está Rodrigo García, que actúa sobre todo en el extranjero pero al que apenas se le puede ver en nuestro país y que estrena Aproximación a la idea de desconfianza. También destaca El cielo es demasiado bajo, original de Ahmed Ghazali con dramaturgia y dirección de Josep Pere Peyró, del grupo catalano-balear La Invenció; recrea un espacio que es un avión por dentro para plantear una reflexión sobre el terrorismo y el miedo. También de Cataluña llega una producción de La perla 29, un centro de creación y producción fundado por Oriol Broggi y Carlota Subirós (del equipo del Lliure); presenta King, una historia de la calle, basado en la novela de John Berger. Y Mr. Kubick Producciones actúa con El gran atasco, su último espectáculo después del aclamado Metro cúbico.

En el capítulo internacional, el Festival incluye espectáculos recomendables como Epílogos, confessions sans importance inspirado en la obra Crímenes Ejemplares de Max Aub. Con dos ejemplares del libro, dos artistas-bailarinas se apoderan de sus textos y de su letanía de asesinatos confesados... Esta interpretado por Roser Montlló Guberna y Brigitte Seth. También danza es Poetic Disaster, a cargo de los coreógrafos Guy Weizman y Roni Haver, ambos de origen árabe-israelí, exmiembros del Bat Sheva Ensemble de Tel Aviv, y que han colaborado con diferentes grupos de Berlín, Barcelona y Bruselas. Centran su trabajo en temas actuales. En el ámbito de la performance, Elegy for the brave. Dislocation, a cargo de un artista de origen ruso, ingeniero de formación, y afincado en Austria, Oleg Soulimenko. Y también una compañía de origen brasileño afincada en Sabadell, Membros, que practica el hip hop. Sus miembros proceden del lugar donde hay más homicidios de Brasil, Macaé, lo que ha marcado profundamente su estilo. Presenta Rayo X.

El Festival se completa con el Ciclo Perfil, dedicado esta año a la coreógrafa alemana Juschka Weigel, de quién ya hemos visto trabajos en Madrid. Wiegel estudió en la Merce Cunningham School de Nueva York y en la Academy of Art, en Solo, Indonesia. A finales de 2003 inició su colaboración con Miguel Muñoz, creando la compañía de danza InThisSection.

Otros ciclos se refieren a espectáculos musicales, experimentales o el llamado Perspectivas, en el que rescata de lo mejor que se ha visto en Madrid. En él figura Mejorcita de lo mío, protagonizado por la actriz Pilar Gómez. ésta, junto con Fernando Soto, ha seguido un proceso de trabajo basado en la creación desde el mismo escenario.

Autoría contemporánea. La programación de La Alternativa, que comienza hoy y se celebrará hasta el 24 de febrero, se caracteriza por un mayor grado de amateurismo y por dar una oportunidad a jovencísimos artistas y autores. Se desarrolla en ocho espacios (Aula 11, Circo de Pulgas, Círculo de Bellas Artes, Tarambana, Triángulo, Teatro de las Aguas, sala Tis y librería Youkali) y reúne compañías de Málaga, Zaragoza, Valencia y Madrid. Estas practican teatro de texto, cabaret, recitales poéticos, danza-teatro y conciertos musicales.

Destacan entre el nutrido número de espectáculos Tristán e Isolda, por la compañía del Gato (Málaga), en la que una pareja de ex-amantes se encuentran para saber el uno del otro. O Caliéntate con las cenizas, un recital poético a cargo de Pablo Cobollo. También la presencia de la compañía sevillana La Tarasca, con el espectáculo Inés .