Teatro

Listos

Portulanos

12 junio, 2008 02:00

Ni Oxford, ni Cambridge, ni Yale, ni la Sorbona, ni siquiera el M.I.T.: hay una universidad por ahí mejor que todas estas instituciones juntas, y no se sabe ni su nombre ni su exacta ubicación geográfica, pero sí consta que se encuentra aquí, en España. También se ignora el número exacto de estudiantes admitidos cada año, la ratio profesor/alumno, o el precio de la matrícula, pero no debe de ser muy cara y sí muy popular, porque salen de ella muchos licenciados. Se les reconoce de inmediato por una característica: saben de todo. Perdón, no es eso lo que quería decir. A lo que me refería es a que opinan de todo, que, obviamente, es algo muy distinto. ¿Que hay una guerra entre cocineros posmodernos? Opinan. ¿Que Chikilicuatre va o no va a Eurovisión? Opinan. ¿Que trasvase sí, trasvase no? Opinan. Opinan con esa apariencia de grave autoridad que les confiere su verbo vehemente aunque soporífero.

¿Y de teatro? ¡Por supuesto que opinan! Es más, me malicio que en esa universidad se imparte un máster, o quizá un doctorado, en fin, esto que ahora llaman posgrado para que suene más europeo, sobre Opinionología Teatral. Allí les enseñan, fundamentalmente, dos cosas. Una: el teatro, al fin y al cabo, no le importa a nadie, así que podéis sacudirle con tranquilidad. Es, por tanto, un objetivo fácil y muy agradecido, pues a ese primer teorema se le suma un corolario: el teatro sí merece un articulillo cuando de lo que se trata es de algún asunto escandaloso o polémico. La segunda lección, consecuencia de la primera, es ésta: como a nadie le importa el teatro, nadie sabe nada sobre teatro, así que el despabilado que emita la primera opinión quedará como erudito del ramo en medio de la ignorancia general por muchas estupideces que diga.

A estos listos les encanta escuchar su propia voz, engolada y sentenciosa: son como los adolescentes que se pasan las horas mirándose en el espejo. Naturalmente, eso es lo que les impide escuchar a los demás. Menuda titulación de mierda.