Roberto Mori durante un momento de Transitus

Un actor recibe la noticia de la muerte de su padre en plena gira internacional. Inicia entonces, como si fuera una narración policíaca, un viaje que le conduce por los rincones del inconsciente, repletos de bruma, de seres extraños y de imágenes engañosas. A través de este periplo onírico acepta una nueva realidad: su propia muerte como hijo. Esta premisa, basada en una experiencia real del actor y director Roberto Mori (Oviedo, 1972), es la que guía la historia de Transitus, un montaje que llegará al Corral de Comedias de Alcalá de Henares el próximo 8 de diciembre.

Las reflexiones sobre la muerte realizadas por Platón, Borges, Rulfo, Lorca, Arrabal, Kafka y Freud han sido referencias de un trabajo que ha tenido en cuenta también la relación con la muerte en las distintas culturas. Todo ello ha ayudado a Mori (que además se sube al escenario junto al piano de Teresa García) a construir un plano dramatúrgico "muy primario" que le ha permitido culminar la puesta en escena. "Ha sido muy interesante observar cómo nuestra búsqueda artística está sustentada por un inconsciente colectivo que nos conecta con símbolos y mitos que viven dentro de nosotros, seguramente registrados en nuestro ADN", señala Mori a El Cultural. Producido por la compañía Plataforma, Transitus ha buscado realizar un espectáculo muy personal, con material propio, para conectar con el pensamiento universal. "De otro modo -matiza el director- este viaje no hubiera tenido ningún sentido artístico".

Rosa Manteiga y Susana Gómez han codirigido esta pregunta escénica sobre qué hay más allá de la muerte para la que, explica Mori, nadie tiene respuestas objetivas: "Este trabajo nos ha permitido cuestionarnos nuestro propio miedo a desaparecer y a dejar de ser. Nos hemos permitido investigar sobre el concepto del espacio-tiempo para enfocar la muerte como un ciclo que no tiene ni principio ni fin".

@ecolote