En el año 2003 Manuel Márquez de la Plata descubrió un libro de Neruda del que no ya el lector común, sino ni siquiera la mayor parte de los especialistas tenía noticia: una antología, preparada por el propio poeta y con prólogo de Salvador Allende, de la que en un principio se pretendía editar un millón de ejemplares que serían regalados "entre la población escolar, los sindicatos y las fuerzas armadas". El libro terminó de imprimirse en septiembre de 1973 y ello explica que no llegara a distribuirse y que la edición entera -o casi- desapareciera. Leída ahora nos permite conocer lo que Neruda consideraba más accesible de su obra, más al alcance de todos.