Dicen que recordar
Alberto Infante Campos
14 julio, 2005 02:00
"Dicen que recordar es una cosa muy especial, que uno no recuerda lo que quiere sino lo que puede", murmura una mujer, mientras piensa cómo recordará lo que está viviendo, la enfermedad de su marido, el hospital, el tratamiento, el coma. Es la idea de un relato intenso y breve, quizá uno de los mejores del libro; por ello su autor no sólo opta por titularlo así, como un señuelo que guía las situaciones que encierra, sino que cierra con él una irregular sucesión de tramas, bien escogidas y contadas, aunque no todas igualmente bien resueltas. Un "pero" razonable ante un trabajo entrañable y valiente.
Su autor, el madrileño Alberto Infante (1949), especialista en medicina nuclear entregado a la gestión de la sanidad pública, rotula con esa idea lo que queda de sus recuerdos, de su compromiso profesional por un mundo más ancho de lo que esperado. De esa ruta vital beben su observación y su experiencia, de ella toma personajes y situaciones, en virtud de una fina sensibilidad que humaniza cuanto rescata para sus historias. En todas está una realidad que se sabe acercar al lector con tonos y puntos de vista cambiantes, aunque un único registro sea el que domine, lo que favorece una lectura fluida y amena al tiempo que resta tensión narrativa. Frente a estas objeciones hay dos títulos del todo recomendables: "Jackson Square"y "Cosas que pasan". Los dos son una prueba de que en esa poética de lo auténtico y lo sencillo está su mejor estilo, el que busca para expre-
sar y redimir sus temores ocultos.
Su autor, el madrileño Alberto Infante (1949), especialista en medicina nuclear entregado a la gestión de la sanidad pública, rotula con esa idea lo que queda de sus recuerdos, de su compromiso profesional por un mundo más ancho de lo que esperado. De esa ruta vital beben su observación y su experiencia, de ella toma personajes y situaciones, en virtud de una fina sensibilidad que humaniza cuanto rescata para sus historias. En todas está una realidad que se sabe acercar al lector con tonos y puntos de vista cambiantes, aunque un único registro sea el que domine, lo que favorece una lectura fluida y amena al tiempo que resta tensión narrativa. Frente a estas objeciones hay dos títulos del todo recomendables: "Jackson Square"y "Cosas que pasan". Los dos son una prueba de que en esa poética de lo auténtico y lo sencillo está su mejor estilo, el que busca para expre-
sar y redimir sus temores ocultos.
