Image: Dios, patria, riqueza

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Letras

Dios, patria, riqueza

Massimo Gaggi

13 septiembre, 2007 02:00

El Empire State Building, símbolo de Nueva York. Foto: Archivo

Traducción de Cuqui Weller. Lengua de Trapo. Madrid, 2007. 237 páginas, 20’80 euros

Entender hoy cómo funciona el mundo sin conocer Estados Unidos es difícil por no decir imposible. Es también evidente que EE.UU. no cabe en un solo libro, pero lo cierto es que esta panorámica que traza Massimo Gaggi es aguda, divertida y repleta de clarividencia. Subdirector del influyente periódico italiano Corriere della Sera entre 2000 y 2004, es desde hace tiempo corresponsal del citado diario en Nueva York.

El año pasado Gaggi se dio a conocer al lector en español con un llamativo libro publicado a medias con Edoardo Narducci titulado El fin de la clase media y el nacimiento de la sociedad de bajo coste. Editado también por Lengua de Trapo, la tesis central del libro -la recensión puede consultarse en elcultural.es- sostiene, con brillantez inusitada, que la clase media está sucumbiendo emparedada entre ricos y desfavorecidos.

En esta nueva entrega, empujada por el anterior éxito, se han reunido, ampliado y retocado textos que provienen de artículos publicados por el "Corriere della Sera" y el "Corrier Economia". A estos 31 artículos se le han añadido una introducción y un epílogo. Para darles cohesión se presentan agrupados en tres grandes secciones. La primera, titulada "Dios", reúne ocho artículos dedicados al fenómeno de la religiosidad en Estados Unidos. El lector español o europeo se da de bruces con una forma inesperada de entender y practicar la religión. Gaggi narra la historia de John Osteen, un pastor que abandona la Iglesia Baptista del Sur fascinado por las creencias carismáticas y pentecostales y que funda en 1959 una congregación sin confesión precisa, capaz de levantar iglesias en las que caben más de dos mil fieles. Al morir en 1999 su hijo Joel, convierte su congregación en un negocio de grandes proporciones mediáticas. Como escribe Gaggi, "las cadenas estadounidenses que tienen en su parrilla los sermones de Osteen alcanzan un público potencial de 225 millones de espectadores. Sus libros, para entender la magnitud del tinglado montado por este telepredicador, logran ventas del estilo de Mi vida de Bill Clinton o del volumen publicado en 1994 por Juan Pablo II".

Para un lector de la secularizada Europa, los datos que muestran el gigantismo de estas "turboiglesias" son casi increíbles. Se alejan bastante de la tradición pero han sabido aprovechar las técnicas del marketing. Su "oferta" religiosa capta bien las necesidades de sus consumidores. En torno a las megaiglesias se ha creado todo tipo de servicios útiles para sus fieles.

Desde la religiosidad Gaggi traza una línea que se adentra en el patriotismo norteamericano. Por todas partes gente que ama su país. La bandera estadounidense por todos lados. Una estructura bien distinta a la nuestra en la que la corrupción de los políticos existe pero es severamente castigada cuando se descubre. Como muestra Gaggi, no todo funciona bien en el país de las barras y estrellas. El matrimonio entre la inteligencia, es decir el espionaje, y la industria está bien avenido pero la CIA es un desastre aunque se diera cuenta de la necesidad de fundar una compañía, In-Q-Tel, capaz de conectar las empresas de tecnologías de la comunicación con la investigación universitaria y militar.

Si alimentación y sanidad constituyen dos problemas mal solucionados en Norteamérica, la riqueza, último apartado del libro, crece y crece. En opinión del autor, los tres motores que han eliminado el espacio y el tiempo como obstáculos para el desarrollo y el comercio mundial son made in USA: Internet, el contenedor y las flotas de aviones de mercancías. El contenedor se le ocurrió en 1959 a un transportista de Carolina del Norte y demostró su utilidad en la guerra de Vietnam. Tres grandes y prácticos inventos decisivos para la creación de riqueza. Pero como señala el autor, a eso hay que añadir la admirable y gigantesca capacidad filantrópica de tantos millonarios norteamericanos.