Kadaré, el testigo de la historia de los Balcanes, gana el Príncipe de Asturias de las Letras
Traducido a más de 40 lenguas, el narrador, poeta y ensayista albanés es el intelectual más destacado y comprometido de su país
24 junio, 2009 02:00Ismail Kadaré.
ELCULTURAL.esEl escritor Ismaíl Kadaré ha sido galardonado este miércoles con el Premio Príncipe de Asturias de las Letras, tras las votaciones del jurado, en las que también han sonado con fuerza Cees Nooteboom, Antonio Tabucchi, Milan Kundera e Ian McEwan. Eterno candidato el Premio Nobel de Literatura, el escritor albanés está considerado como el intelectual más importante de su país, y ha sido traducido a más de cuarenta lenguas, entre ellas el castellano, el catalán y el euskera.
El acta del jurado, leída por Víctor García de la Concha, presidente de la Real Academia Española, designa a Ismaíl Kadaré ganador del galardón "por la belleza y el hondo compromiso de su creación literaria". Y continúa: "Kadaré narra con lenguaje cotidiano, pero lleno de lirismo, la tragedia de su tierra, campo de continuas batallas. Dando vida a los viejos mitos con palabras nuevas, expresa toda la pesadumbre y la carga dramática de la conciencia. Su compromiso hunde las raíces en la gran tradición literaria del mundo helénico, que proyecta en el escenario contemporáneo como denuncia de cualquier forma de totalitarismo y en defensa de la razón.
El premio ha recaído en ediciones anteriores en autores como José Hierro, Juan Rulfo, Ángel González, Mario Vargas Llosa, Camilo José Cela, Claudio Rodríguez, Carlos Fuentes, Francisco Umbral, Günter Grass, Augusto Monterroso, Doris Lessing, Arthur Miller, Susan Sontag, Paul Auster, Amos Oz y Margaret Atwood, que lo obtuvo en 2008.
Un novelista en el centro de la tragedia de los Balcanes
Nacido en Gjirokaster, en el sur de Albania, en 1936, fue hijo de unos modestos funcionarios. Durante la Segunda Guerra Mundial, su ciudad fue sucesivamente ocupada por los italianos, los griegos, las fuerzas reaccionarias albanesas, los alemanes, y finalmente fue liberada por los partisanos albaneses, circunstancia que convirtió al autor en un testigo directo de la historia.
Estudiante de letras en Tirana, acabó la carrera en el Instituto Gorki de Moscú. De vuelta a su país, en 1960, ejerció como periodistas en varias revistas literarias y empezó a publicar poesía. Su primera novela, El general del ejército muerto, le procuró un éxito temprano y le dio a conocer en el extranjero como un autor de talento. Desde entonces ha publicado un gran número de novelas, entre las cuales El palacio de los sueños, El monstruo, Abril roto, El año negro, Los tambores de la lluvia y El firman de la ceguera, están inspiradas en gran parte por leyendas y por la historia albanesa.
Muchnik, primer editor en España: "El Premio salda una deuda que tiene la sociedad con él"
En declaraciones a ELCULTURAL.es tras conocer la noticia, Mario Muchnik, uno de los primeros editores de Kadaré en España, ha destacado el hecho de que el autor albanés sea una figura literaria desde hace muchos años. "Incluso cuando yo lo edité, con El puente de piedra y El palacio de los sueños, durante los primeros noventa, ya era un autor muy reconocido. Lo que sucede es que en España es que a muchos autores extranjeros el público los conoce sólo a raíz de estos premios".
En la opinión de Muchnik, Kadaré es "un grandísimo escritor, con aspectos del Kafka más onírico y al mismo tiempo comprometido políticamente, aunque le hayan acusado de haber vacilado por su afinidad al régimen comunista en el pasado".
"Yo no leo albanés -continúa Muchnik- pero puedo decir que sus obras son formidables. Aunque él siempre le haya dado mucha coba a su traductor francés, en mi opinión esas traducciones son mediocres, parecen escritas por un alumno aventajado del Liceo Francés. O se lee el albanés o las mejores traducciones son las de Ramón Sánchez Lizarralde, pues son fieles al tono vasto de Kadaré, que es parte de su literatura", defiende el editor.
En cuanto a las anécdotas de sus encuentros con el autor de Los Tambores de la Lluvia, Muchnik, que lo define como una persona "afable", recuerda una ocasión en la que, invitado por Anaya para ofrecer unas conferencias en España, Kadaré pronunció la siguiente frase: "Estamos habituados a vivir con la velocidad de la ciudad, pero la literatura lo hace con la velocidad de los astros". Según Muchnik, esta frase habla bien de la cualidad de Kadaré como experto en los clásicos, e implica que para el novelista albanés, la literatura debe ser lenta, esto es, que no existe otro tipo de literatura.
"El premio puede aportarle a Kadaré un desagravio, por el asunto de ser candidato al Nobel y no recibirlo nunca. Pienso que en Suecia subsiste cierto rechazo a su figura por su coqueteo con el régimen comunista. El Príncipe de Asturias para él significa el saldo de un tipo de deuda que tiene la sociedad con él. Y, al contrario, el galardón se beneficiará de premiar a un autor como él".
El accidente, próxima novedad de Kadaré para otoño
En Alianza andan felices tras el fallo a favor de uno de sus autores mimados. Su directora editorial, Valeria Ciompi, ensalza la labor del sello a la hora de rescatar sus libros más antiguos. "No sólo nos hemos limitado a publicar sus novedades, también hemos recuperado una parte importante de su obra", afirma. Es un esfuerzo especialmente valioso en un autor como Kadaré que "considera que ninguno de sus libros está completamente cerrado y que no deja de rescribirlos, por una exigencia literaria muy alta".
Ciompi define al autor albanés como el dueño de "una prosa ágil y brillante, y muy metafórica, recurso este último que debió emplear para eludir a la censura de su país". En el plano comercial, Kadaré no ha sido un superventas, pero, "siempre ha gozado de unos lectores fieles que le han dedicado una atención constante. Un atención que ha ido creciendo con el paso de los años".
Ahora el mundo anglosajón ha empezado a fijarse también en él. El accidente es la novela que ha servido de punta de lanza para introducirle en este codiciado mercado. La obra será publicada por Alianza el próximo otoño, según revela Ciompi.
García de la Concha: "Aunque puede parecer localista su reflexión es universal"
El director de la Real Academia Española, Víctor García de la Concha, afirma que Kadaré "no es un escritor de minorías" ya que "aunque puede parecer localista" su reflexión es "universal". Por eso, reseña que es un autor al que el Premio Príncipe de Asturias de las Letras "acoge con honor".
García de la Concha incide además, en que se trata de un escritor muy leído y traducido a muchos idiomas, y desde que vive en Francia "muy proyectado". También resaltó que la obra de Kadaré explica como "el totalitarismo no tiene límites, es voraz e intenta controlarlo todo".
Por su parte, Blanca Berasátegui, directora de El Cultural y miembro del jurado, indica que el premio no se ha concedido por unanimidad. Reseña, además, que se trata de "un escritor de culto" y confía en que el premio "le sume lectores entre los españoles". Asimismo, señala que Kadaré es un autor "muy comprometido con su país en sus obras" y que "tanto sus novelas como sus ensayos incluyen una reflexión y una crítica feroz contra los totalitarismos". También apunta que Kadaré está siempre entre los finalistas del Premio Nobel de Literatura y asevera que "merece un reconocimiento por parte del público mayor del que ha tenido", por lo que se muestra contenta del fallo del jurado.
Asimismo, la presidenta de la comisión de Humanidades del PEP de la Aneca y catedrática de Literatura Española, Rosa Navarro, Durán señala que la historia que plasma Kadaré es personal pero "se puede asumir como propia" porque "el campo de batalla es la vieja Europa con mil heridas hechas de una manera absurda". En este sentido, remarca que Kadaré ha puesto su escritura "en defensa de la libertad de todos, e intentando que no se repitan esas tragedias que consisten en matarse unos a otros".
Ante una trayectoria de nueve años sin premiar a las letras hispanas, Rosa Navarro aseveró que "no pasa nada" ya que entiende que no se debe tener "obsesión por los cupos" ni de mujeres ni de autores hispanos. "Los escritores hispanos siguen siendo buenísimos", apuntó remarcando que lo que se hace con este galardón es "abrir el conocimiento en nuestro país y el reconocimiento universal de grandes escritores".
Sánchez Dragó: "Es una extravagancia premiar a Kadaré"
El escritor Fernando Sánchez Dragó, miembro del jurado que ha concedido el Premio Príncipe de Asturias de las Letras considera que la Fundación que concede los galardones "puede y debe permitirse el lujo de alguna extravagancia, y este premio lo es".
El escritor asegura "conocer muy mal" la obra de Kadaré -"como me temo que le sucede a la mayor parte de la gente"- lo que le ha llevado a dejar su papeleta en blanco en la última votación al igual que otros miembros del jurado. "He decidido votar en blanco porque no tengo una opinión fundamentada sobre este escritor, que quizá sea magnífico", ha afirmado el autor de El camino del corazón que, no obstante, ha cuestionado que su obra sea superior a la de otros candidatos como Juan Goytisolo, Haruki Murakami o Ian McEwan.
A su juicio, en el ánimo de la mayoría del jurado que ha optado por distinguir a Kadaré "ha podido pesar" el hecho de que el autor albanés sea "un eterno candidato" al Nobel de Literatura, "y sería un pisotón en caso de que finalmente se lo den". "Hemos premiado al escritor más importante de Albania, lo que no sé es si hay otros", ha ironizado Sánchez Dragó.
Por el contrario, para el académico y presidente de El Cultural, Luis María Anson, aunque en el jurado ha habido "mucho debate" Kadaré ha logrado "una mayoría holgada" gracias a la "extraordinaria calidad literaria" de sus novelas y ensayos ya que las traducciones disponibles no permiten "juzgar" su poesía. Para Anson, la obra del autor galardonado, "que honra al Premio Príncipe de Asturias", destaca "por su dimensión y hondura así como por su profundidad y su entendimiento de lo que es la vida en ese mundo de los Balcanes dominado por los turcos durante siglos".
Según el poeta y ensayista Antonio Colinas, también miembro del jurado, Kadaré "combina de forma ideal la tradición con el presente" y en su obra aparecen las raíces helénicas de la cultura europea para retratar un presente "en el que pesa la dura realidad del siglo XX en los Balcanes", una región que ha sido escenario de "un choque de culturas y grandes enfrentamientos ideológicos y bélicos".
Para la escritora Berta Piñán, el autor galardonado es "uno de los grandes disidentes contra el totalitarismo" y procede "de un mundo cercano, pero que queda muy lejano".