César Alonso de los Ríos en 2007. Foto: Diego Sinova

El periodista y ensayista César Alonso de los Ríos ha muerto a los 82 años este martes, 1 de mayo, en el hospital Puerta de Hierro de Madrid. Natural de Osorno, Palencia (1936), fue jefe de redacción de la revista Triunfo y director de La calle antes de recalar en el diario ABC.

Hombre de vasta cultura, de su obra ensayística destacan las Conversaciones con Delibes (1971) mantenidas con el célebre escritor y académico castellano, ganador del Premio Cervantes y del Príncipe de Asturias de las Letras, que lo fichó para el Norte de Castilla y fue su principal maestro intelectual y periodístico. También fue admirador de los ideales regeneracionistas de la Generación del 98 y del filósofo José Ortega y Gasset.

Como otros periodistas e intelectuales de su generación, De los Ríos fue antifranquista e izquierdista en sus años de juventud y con los años su posicionamiento político fue desplazándose hacia la derecha liberal, lo que tuvo su reflejo en su trayectoria periodística. Militante comunista y del Frente de Liberación Popular en la clandestinidad durante el franquismo y afiliado socialista durante los primeros años del Gobierno de Felipe González, se volvió crítico con la izquierda y finalmente rompió con ella debido al apoyo que esta brindó al nacionalismo periférico, contrario a su visión unitaria e igualitaria de España, y llegó a comulgar con algunos postulados del Gobierno de Aznar. Este descontento lo plasmó en ensayos como Si España cae. Asalto nacionalista al Estado, La izquierda y la nación. Una traición políticamente correcta o Yo digo España.

"Me desmoraliza la desmoralización de España", dijo De los Ríos en una entrevista en El Cultural en 2010 con motivo de la reedición de Soy un hombre de fidelidades, basado también en conversaciones con Delibes y publicado originalmente en los años sesenta.

Otro de sus libros más conocidos, que causó cierto revuelo tras su publicación, fue La verdad sobre Tierno Galván, una biografía muy crítica con el político socialista y alcalde de Madrid entre 1979 y 1986.

También publicó en 2007 Yo tenía un camarada, que tomaba el título de una conocida canción militar alemana usada por los falangistas españoles para trazar en sus páginas el viraje ideológico de buena parte de los maestros intelectuales de la izquierda española que habían tenido un pasado franquista, como Pedro Laín Entralgo, Vicens Vives, Josep Plá o Torrente Ballester.