Siri Hustvedt. Foto: Marion Ettlinger

Siri Hustvedt. Foto: Marion Ettlinger

Letras

Siri Hustvedt, Premio Princesa de Asturias de las Letras

La escritora estadounidense, novelista de ideas que mezcla en sus textos el psicoanálisis, la filosofía o la neurociencia, ve reconocida la profundidad y calidad de su literatura. El jurado la premia como "una intelectual que incide en nuestro presente convulso y desconcertante, desde una perspectiva de raíz feminista".

22 mayo, 2019 18:00

La escritora estadounidense Siri Hustvedt, autora de obras como Todo cuanto améEl mundo deslumbrante o la reciente Recuerdos del futuro, ha sido galardonada este miércoles con el Premio Princesa de Asturias de las Letras 2019, convirtiéndose en la octava mujer en lograrlo tras el reconocimiento de la francesa Fred Vargas el año pasado"Me siento realmente feliz y honrada al recibir este premio. También siento sorpresa, asombro y gratitud”, ha expresado al enterarse. La narradora, cuya candidatura ha sido propuesta por Mauro Guillén, miembro del jurado del Premio Princesa de Asturias de Ciencias Sociales, consigue así los 50.000 euros y la escultura de Joan Miró con que está dotado el premio, que recogerá el próximo otoño. Columnista en The New York Times, y reconocida experta en trastornos neuronales y otros temas psiquiátricos que pueblan sus escritos, Hustvedt ha desarrollado una intensa obra de ficción traducida a más de treinta idiomas.

El jurado, presidido por Santiago Muñoz Machado, director de la Real Academia Española, ha destacado que la obra de Hustvedt es "una de las más ambiciosas del panorama actual de las letras. Incide en algunos de los aspectos que dibujan un presente convulso y desconcertante, desde una perspectiva de raíz feminista", como evidencian sus novelas y ensayos como La mujer que mira a los hombres que miran a las mujeres. Además, el jurado considera que esta incidencia es fruto del papel de la escritora como "una intelectual preocupada por las cuestiones fundamentales de la ética contemporánea. Traducida a más de treinta idiomas, contribuye con su obra al diálogo interdisciplinar entre las humanidades y las ciencias", concluye, alabando la interdisciplinariedad de su pensamiento.

Estadounidense de origen noruego, nacida en Minnesota en 1955, Siri Hustvedtentró en el mundo de la literatura a los 13 años durante un viaje a Islandia en el que se enamoró del David Copperfield de Charles Dickens, una memoria disfrazada de ficción, como su última novela Recuerdos del futuro, donde vuelca sus principales obsesiones literarias: la crítica a las estructuras de poder y al patriarcado, la fusión de realidad y ficción, la falta de fiabilidad de la memoria y la importancia de contar historias. "Sigo siendo insaciablemente curiosa a los 64 años", explicaba a El Cultural en una entrevista a raíz del libro.

De poeta a narradora

En 1986 se doctoró en Literatura Inglesa por la Universidad de Columbia con una tesis sobre su adorado Dickens en la que ya aparecen sus autores de referencia, especialmente Kierkegaard, Freud, Lacan, Mary Douglas o Julia Kristeva. Comenzó probando suerte como poeta, llegando a publicar en The Paris Review y la colección de poesía Reading to You en 1982, pero se decantaría por el ensayo y la novela. En esos años, se estableció definitivamente en Nueva York, donde vive actualmente con su marido, el también escritor Paul Auster, quien también recibió el Príncipe de Asturias en 2006. Una década después de aquel poemario, llegaría su primera novela,Los ojos vendados (1992), un juego de espejos donde el centro ya es un conflicto de identidad, algo constante en su obra. Sería con su tercera obra,Todo cuanto amé (2003), cuando le llegaría el reconocimiento internacional.

La relación de Hustvedt con la novela siempre ha estado supeditada a su interés por la memoria y por los propios recuerdos. "Nuestros recuerdos están llenos de ficción y la escritura está siempre conectada con el recuerdo, incluso cuando los eventos descritos están completamente inventados. Escribir ficción es como recordar lo que nunca sucedió", asegura la autora. Además, en esa intención suya de unificar todo lo humano, la escritora defiende el ritmo como elemento clave de la escritura. "Gran parte de una novela radica para mí en el ritmo, un tipo de música que descubro al principio del proceso de escritura y que luego impulsa el libro. Los ritmos de un texto crean significados en el oyente no siempre fáciles de explicar, pero cruciales para la experiencia de lectura", explica. Un lector al que coloca en el pedestal más alto. "Siempre he sabido esto: cada lector inventa el libro por sí mismo. A veces surge el amor y a veces no, pero siempre hay una colaboración entre texto y lector.

Pero además de novelas como Elegía para un americano (2008), El verano sin hombres (2011) o Un mundo deslumbrante (2014), Hustvedt ha escrito varios libros de ensayos donde mezcla intereses tan dispares como el psicoanálisis, el arte, la filosofía o la neurociencia. Hacia esta última se ha volcado mucho desde los 90. "Fui profesora de escritura voluntaria para pacientes psiquiátricos durante cuatro años. Ahora enseño psiquiatría en una escuela de medicina y publico en revistas sobre psicoanálisis, psiquiatría o trastornos neurológicos. Ha sido un viaje largo y muy interesante". Muy interesada también por la pintura, ha impartido charlas sobre este tema en el Museo del Prado y en el Metropolitan Museum of Art de Nueva York y ha publicado un volumen de ensayos Los misterios del rectángulo (2005).

Entre ciencias y letras

Estudiosa e intelectual que se ocupa de las cuestiones fundamentales de la ética contemporánea y la epistemología y conocida también por su militancia feminista, Hustvedt ha contribuido con su obra al diálogo interdisciplinario entre las ciencias y las humanidades. "Desde que era joven me han interesado las grandes preguntas filosóficas que comparten niños y metafísicos: ¿Qué es un ser humano? ¿Qué significa pensar? ¿Por qué los seres humanos se representan a sí mismos? ¿Qué es esa vocecita en nuestras cabezas?", explica.

Prueba de ese interés es que ha publicado ensayos y artículos en revistas académicas y científicas, entre otras en Contemporary PsychoanalysisSeizure: European Journal of EpilepsyNeuropsychoanalysis y Clinical Neurophysiology.Su colección de 32 conferencias y artículos pronunciadas y publicados respectivamente entre 2005 y 2011, Vivir, pensar, mirar (2013) es una muestra de su amplio y profundo aprendizaje en varias disciplinas. En ellos desarrolla algunos de sus temas preferidos, relacionados con la literatura, la filosofía, la psicología, el psicoanálisis y las neurociencias. "Estas disciplinas, junto con otras como la historia o la sociología, están unidas porque aportan una visión de lo que significa ser humano. La razón por la que rara vez se reúnen es que vivimos en una cultura de hiperespecialización. Cada disciplina es demasiado a menudo una isla propia, un gran error".

Todavía faltan tres

En esta edición concurrían al galardón de Letras un total de un total de 28 candidaturas procedentes de 17 países. Este ha sido el quinto de los ocho Premios Princesa de Asturias que se conceden este año, en que cumplen su trigésimo novena edición. Anteriormente fueron otorgados el Premio Princesa de Asturias de las Artes al dramaturgo británico Peter Brook, el de Comunicación y Humanidades al Museo Nacional del Prado, el de Cooperación Internacional al matemático e ingeniero estadounidense Salman Khan y la Khan Academy y el de los Deportes a la esquiadora estadounidense Lindsey Vonn. En las próximas semanas se fallarán los correspondientes a Ciencias Sociales, Investigación Científica y Técnica y Concordia.

El Jurado del Premio Princesa de Asturias de las Letras 2019 ha estado integrado por Xosé Ballesteros Rey, Xuan Bello Fernández, Blanca Berasátegui Garaizábal, Jordi Gracia García, Lola Larumbe Doral, Antonio Lucas Herrero, Carmen Millán Grajales, Rosa Navarro Durán, Leonardo Padura Fuentes, Pablo Remón Magaña, Laura Revuelta Sanjurjo, Ana Santos Aramburo, Íker Seisdedos García, Diana Sorensen, Juan Villoro y Fernando Rodríguez Lafuente, y presidido por Santiago Muñoz Machado.