Cierra sus puertas la librería Lagun, símbolo de la resistencia contra ETA

Después de más de medio siglo abierta, la librería Lagun de San Sebastián cierra sus puertas este fin de semana. Así lo ha anunciado Elena Recalde en El Mundo. Recalde es hija de los antiguos dueños del establecimiento: José Ramón Recalde y María Teresa Castells. Ellos, junto con Ignacio Latierro, abrieron Lagun en 1968 en pleno centro de la parte vieja de la ciudad.

La librería tomó su nombre de la palabra en euskera que significa 'amigo' y nació en la época de la Transición de la cultura española. Con la Ley de Libertad de Imprenta de Manuel Fraga de 1966 se permitió la publicación y la venta de libros prohibidos de la primera parte de la dictadura franquista. En aquellos años España se llenó de librerías como Lagun.

Esta librería vasca comenzó a ser revolucionaria en sus primeros años, donde albergaba reuniones clandestinas de partidos políticos y sindicatos, además de vender libros no autorizados. Por ello, las autoridades franquistas consideraron que Lagun era un establecimiento de la cultura progresista e inconformista. Los ultras atacaron en diversas ocasiones los escaparates de Lagun y amenazaron a los libreros con pintadas. En el libro Allí donde se queman los libros de Gaizka Fernández Soldevilla y Juan Francisco López se hace memoria de las distintas librerías que sufrieron ataques de fanáticos como Lagun, Antonio Machado (Madrid) o Tres i Quatre (Valencia).

Lagun, sin embargo, se diferencia porque 20 años después, comenzó un nuevo enfrentamiento contra el grupo terrorista ETA. El conflicto comenzó en 1994, cuando un terrorista de la organización murió víctima de una bomba que estaba manipulando. Debido a este suceso, los partidarios de ETA convocaron un día de luto y recorrieron las calles de la Parte Vieja de San Sebastián para presionar a los comerciantes para que cerrasen los negocios ese día. Los libreros de Lagun se negaron a hacerlo, así que ETA, desde aquel entonces, les consideró enemigos del pueblo.

José Ramón Recalde fue ametrallado por el terrorista Óscar Celarain cuando salía de su coche. Sobrevivió al atentado, pero Lagun cerró durante algunos meses.

Comenzaron haciendo pintadas amenazantes, después, la librería sufrió un saqueo en 1996 donde rompieron los escaparates y se llevaron algunos libros para quemarlos en la Plaza de la Constitución. El 14 de septiembre de 2000, José Ramón Recalde fue ametrallado por el terrorista Óscar Celarain cuando salía de su coche. Recalde sobrevivió al atentado, pero Lagun cerró durante algunos meses.

La librería estuvo a punto de cerrar, pero sus dueños decidieron trasladarla a una parte más tranquila de la ciudad. Durante aquellos años los libreros de Lagun han recibido apoyo de parte de amigos e intelectuales cercanos, incluso de las instituciones. En 2002, el Ayuntamiento de San Sebastián le otorgó la Medalla al Mérito Ciudadano a María Teresa Castells y en 2007 el ministro socialista Jesús Caldera le impuso la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo.

Recalde murió en 2016 y Castells en 2017. El Mundo ha recordado una anécdota de la librería del escritor Fernando Aramburu: ni los matones de ultraderecha asaltaron Lagun en los años 70 ni los militares de la Kale Borroka que atacaron el local en 1996 aprovecharon los saqueos para robar libros. Los libros no les interesaban, en realidad.