La familia del libro crece: diez nuevas editoriales independientes piden paso
- El Cultural reúne a diez nuevos sellos nacidos en el último año, ejemplos de diversidad, imaginación y pasión por la cultura.
- Más información: Estrategias de adaptación de las editoriales ante las nuevas tecnologías y la segmentación del mercado
Más allá de los grandes grupos que dominan el mundo del libro en España y que buscan maximizar facturaciones y cuentas de resultados, hoy en los márgenes se multiplican las editoriales independientes, muchas de ellas minúsculas, que apuestan por la calidad, por voces nuevas y planteamientos inéditos, mimando las traducciones, el diseño y la originalidad con perspectivas inesperadas. El Cultural reúne a diez nuevos sellos nacidos en el último año, ejemplos de diversidad, imaginación y pasión por la cultura.
Plasson et Bartleboom
Con el entusiasmo de acabar de presentar su primer título, Mapas y perros, de Unai Elorriaga, los editores de Plasson et Bartleboom confiesan: "Siempre habíamos fantaseado con montar algo juntos y hace un año se dieron las condiciones: tuvimos el tiempo, el dinero y las ganas". Son Alba Carballal (Lugo, 1992), que se ocupa de la ficción, Octavio Barriuso (Burgos, 1990), responsable de la no ficción y Alberto Sáez Silvestre (Madrid, 1977), también socio de Libros del K.O., al mando de la nave empresarial.
Con un presupuesto inicial de 60.000 euros, reivindican la lentitud porque quieren "publicar lo que nos gustaría leer si no tuviéramos prisa. Narrativa y ensayo, aunque nos gustan los libros híbridos, difíciles de encasillar. El criterio siempre será la calidad". En principio piensan editar doce o catorce libros al año, con una tirada inicial de 1.500 o 2.000 ejemplares.
En cuanto a sus modelos, reivindican a las editoriales con las que se formaron como lectores, como Seix Barral, Anagrama o Acantilado. "Elena Ramírez o Jorge Herralde son figuras de referencia para nosotros. También hay sellos pequeños que nos encantan, como Las Afueras o Chai". Además, tienen muy claro que tipo de libro no editarán jamás: "Crónica periodística, porque Alberto también es responsable de Libros del K O.".
Omen
Con un presupuesto inicial que se "ha quedado muy corto, de 30.000 euros", Oana Mosniagu (Vaslui, Rumanía, 1986) comenta que Omen fue inicialmente su proyecto de curso en un máster de edición que hizo en 2016/17, pero que –aclara– "se convirtió en un planteamiento cuando, al presentarlo, entendí que podría ponerse en práctica y, se volvió decisión firme cuando me encontré con dos lecturas que me obligaron, con su contenido, a darlas a conocer, El hombre nuevo, de Grigore Dumitrescu, y Las máscaras del miedo, de Camelia Cavadia", títulos con que arranca el sello.
"Buscamos profundidad, autenticidad y relevancia. Empezamos con literatura rumana inédita en español porque tenemos conocimiento de los tesoros que esconde. Y, en general, buscamos autores que emocionen, enfaden, provoquen, o hagan sonreír (mucho); en definitiva, que tengan algo que decir y no cualquier cosa". Prevén editar 6 títulos en 2025 y crecer cada año: "No tenemos limite. En cuanto a la tirada, lo mismo. Estos dos primeros títulos salen con una tirada de 2.000 ejemplares cada uno y nos adaptaremos según nos quieran (o no) los lectores".
Pimienta Ediciones
El poeta cubano Alexis Díaz Pimienta (La Habana, 1966) creó Pimienta Ediciones "con el objetivo de llenar un vacío en la décima y las artes orales en España y Latinoamérica". "Buscamos –añade– impulsar estas formas de expresión, tanto en su tradición como en su evolución contemporánea. Un universo tan antiguo como desconocido". Se trata, insiste, de preservar la tradición y también su evolución. "Difundimos la décima y las artes orales en un formato accesible y creativo, vinculando lo clásico con lo contemporáneo, a través de nuevos formatos como audiolibros y libros digitales", afirma.
Por eso, van a editar libros de décimas y ensayos sobre artes orales, "así como poesía, narrativa y literatura infantil y juvenil, buscando propuestas en las que dialoguen la tradición y la vanguardia". Aunque su presupuesto es "modesto, pero estructurado para permitir una expansión progresiva", planean publicar 10-12 libros al año, con tiradas de 500 a 1.000 ejemplares. "Por cierto, uno de los títulos que más ilusión nos hace es el primer decimario del trovador cubano Silvio Rodríguez".
Plankton Press
Editorial "sin rumbo" de no ficción narrativa, Marta López (Logroño, 1967) y Claudia Pérez Herrero (Madrid, 1998), responsables de Plankton Press, explican que desean demostrar que la realidad y el pensamiento pueden ser tan estimulantes como la fantasía. Por eso "buscamos ensayos que se lean como una novela memorias que atrapen, o divulgación que no descuide la literatura. Y mucha diversidad, en temas y en autores".
Su público son esos lectores curiosos "para los que un libro es la puerta a una conversación", y aunque no quieren descubrir su presupuesto ("demasiado poco"), su objetivo es editar diez libros al año. "Es difícil que salgan los números con menos. Las tiradas están entre los 1.000 y los 2.000 ejemplares, pero el aumento del precio del papel y con ello de la impresión hace este cálculo cada vez más ajustado y difícil. La meta es vender el 60% de la tirada". En cuanto a la causa de la actual proliferación de nuevas editoriales independientes, no lo dudan: "Somos un país de locos y locas idealistas".
La Pipa de Kif
Menos de la impresión, José Alcaraz (Cartagena, 1983) se encarga de todo en esta editorial recién nacida que pretende "publicar buenos libros y hacerlo de manera asequible para garantizarnos el cuidado de la edición. Por lo demás, alejarnos de todo discurso grandilocuente". Su presupuesto "es de los de libro a libro. Pero estamos acostumbrados a las estrecheces, no nos sientan tan mal", y su idea es lanzar seis títulos anuales "con tiradas pequeñas y reimpresiones, porque la optimización de las tiradas es una vital para nosotros".
Para Alcaraz, que fundó la editorial Balduque en 2014, la multiplicación de sellos independientes se debe a "ser un país muy artista donde hay gente con ganas de aportar su grano de belleza".
Itsumustain
Tras pasar más de una década colaborando con numerosas empresas y editoriales con encargos de corrección de estilo, informes de lectura, traducción, diseño gráfico y producción, Ana Tarancón (Madrid, 1986) y Yónatan Pereira (Ondarroa, 1986) montaron su editorial que pretende editar 6 títulos al año, aunque en 2024 solo han sido dos pero "de gran calado".
"Publicamos aquello que consideramos que tiene una altísima calidad". Cuentan con una colección de Infantil, otra de narrativa para autores noveles, otra de divulgación y ensayo y "en breve abriremos una de poesía y otra de novela gráfica". A su juicio, el éxito actual de los sellos pequeños estriba en "la diversidad de los lectores y en la búsqueda de libros diferentes que los grandes grupos no editarían".
Sonámbulo
Sobre la base económica inicial de 10.000 euros, los socios de Sonámbulo (Lola Maleno, Joaquín Puga, Ramón L. Pérez, Daniel Fajardo y Javier Bozalongo) unen en su proyecto "la imagen y la palabra", que dialogan en muchos de sus libros: fotografía y poesía, ilustración... "sin olvidar obras genuinamente fotográficas, así como una colección de poesía y otra recién creada de narrativa".
La idea es lanzar entre 15 y 20 títulos por año entre las tres colecciones principales: poesía, narrativa y fotografía, y conjeturan que "si el precio está bien calculado, con la venta de la mitad de la edición deberían estar cubiertos los gastos". También saben lo que jamás publicarán: "Libros ofensivos o discriminatorios".
El burro lector
"Burro lector es una idea que nace en Santiago de Chile, pero es en Madrid donde me decido a publicar el primer libro, para generar contenidos enfocados en el universo infantil, aunque atractivos para todas las edades", destaca Bárbara Cáceres (Santiago de Chile, 1983), responsable del trabajo creativo, de edición, maquetación y diseño editorial. Su primer libro se publicó gracias a un crowdfunding y desde ahí todo se ha reinvertido en nuevas publicaciones.
Su idea es publicar entre uno y dos títulos al año, con tiradas de 300-500 ejemplares. Con todo, lo que jamás editará serán "esos libros que se llaman a sí mismos 'personalizados', porque reducen la personalidad de la persona a un mismo relato seriado".
Cielo Santo
La filosofía editorial de Blanca Martínez (Madrid, 1991) y Sofía Machain (Madrid, 1992) es la de explorar el pensamiento actual "a través de las relaciones posibles con la alteridad que han sido invisibilizadas o son asimétricas: con los cuerpos, la naturaleza, la tecnología o los fantasmas pasados o futuros. Lo reflejamos priorizando la hibridación de géneros".
Con una inversión inicial de 20.000 euros, quieren lanzar 6 libros al año, con una tirada entre los 700 y los 1.000 ejemplares. Y no dudan de que la multiplicación de pequeñas editoriales se debe "a la quiebra social y política en la que vivimos. La fractura en el sistema y la toma de palabra de los agentes hasta ahora invisibilizados posibilita nuevos ángulos y discursos que merecen ser leídos".
Los reyes del mambo
Sostiene Pablo Villaverde (Santiago de Compostela, 1977) que la intención de su editorial, en la que sigue invirtiendo porque aún no tiene ganancias, "es primero hacerle pasar un rato divertido a todo aquel que se acerque a nuestros libros, y después (y aquí viene lo poético) hacerle ver a la gente que no lee porque cree que los libros son un coñazo que la literatura mola un huevo".
Orientada hacia el humor "y a todo lo que sea un poco underground", pretende editar al año 8 títulos, "lo que hace que la lástima de no poder publicar más libros se compense con la calidad de los que sí se incorporarán al catálogo, y si este año ya se logra sacar alguno que llegue a los 500 ejemplares, en Navidad se brindará con champán".