Ensayo

El franquismo

Giuliana di Febo y Santos Juliá

12 enero, 2006 01:00

Foto: Leticia Pérez

Paidós,2005. 190 páginas, 15 euros

Explicar el franquismo en todos sus aspectos de modo claro y sistemático en menos de 200 páginas es el reto que asumen los autores de este libro, que recuerda por la forma en que está escrito y organizado al manual para estudiantes extranjeros, pues no se da nada por sabido y se incluyen escuetos resúmenes tras cada capítulo.

Organizado de forma tradicional, con un protagonismo claro de los asuntos políticos, se da también una gran importancia a los asuntos económicos, desde una autarquía poco menos que letal hasta aquel desarrollismo que aparece con más sombras que luces (desequilibrios, emigración, etc.). Se percibe además el esfuerzo de los autores para situar en esas coordenadas político-económicas el resto de los factores explicativos del país y la época, desde las transformaciones sociales o la evolución de las costumbres a la insatisfacción de los intelectuales. Hay en este aspecto unas alusiones muy pertinentes a las novelas más significativas del período, desde Nada a Tiempo de silencio, y a las películas y cineastas del momento (de Bardem a Berlanga), sin olvidar el papel de la censura en la restricción creativa, con sus ecos en la vida cotidiana.

Se opta por la periodización comúnmente admitida: el punto de partida -primer capítulo- es el "nuevo Estado" que surge de una guerra no sólo civil sino de exterminio, un régimen personalista que sobrevive a la conflagración mundial gracias a las circunstancias y no a la clarividencia del Caudillo; una segunda fase de asentamiento, con la guerra fría como algo más que mero telón de fondo, con fuerte represión interna y protagonismo ideológico de lo que luego se conocería como nacional-catolicismo; una evolución sui generis en tercer término que combina la apertura económica y la gestión tecnocrática con el mantenimiento de un sistema fuertemente autoritario que no evita el afloramiento de la protesta (en el mundo laboral y universitario: aquí la paradoja es que los disidentes son los hijos de los vencedores); y, por último, la descomposición del régimen, con una patética incapacidad de dar respuesta desde dentro a una contestación generalizada.

Se completa esa visión de conjunto con un corto pero muy expresivo apéndice documental (del "discurso de unificación" de 1937 al "Diguem no" de Raimon), una breve cronología y unas apretadas páginas de bibliografía comentada. Con un tono académico y contenido en la forma, pero firme y severo en el contenido, se traza un panorama muy crítico de un período de la historia caracterizado por cuatro factores fundamentales: una represión implacable del opositor que se fue suavizando relativamente; una ideología contraria a la modernidad convertida en doctrina político-religiosa opresiva; una política económica titubeante que termina dando innegables resultados y, en fin, sobre todo, la sorprendente persistencia de una estructura basada no tanto en un modelo identificable como en el poder personal del propio Franco.