El inocente diálogo entre Pollo y Erizo en el huerto protagoniza este sencillo cuento de Pablo Albo, archipremiado autor alicantino que se define como un simple "domador de palabras". La tranquilidad de estos encantadores personajes vuela cuando el cielo se nubla y el viento travieso se ensaña con una nube que empieza a adoptar la silueta de diferentes animales, como nos muestran las cercanas ilustraciones de Lucía Serrano. Entonces, los pequeños dan rienda a la fantasía y del ratón inicial pasamos a un gigantesco gato que parece habérselo zampado. De un fiero lobo al salvaje león que irrumpe cuando nuestros amigos bajan la vista por unos instantes. Toda una cadena de criaturas cada vez más imponentes que van devorándose unas a otras y hacen pasar a Pollo y Erizo por un abanico de emociones, que siempre serán más llevaderas con un buen amigo a tu lado.