Novela

Mi oído en su corazón

Hanif Kureishi

5 enero, 2006 01:00

Hanif Kureishi. Foto: Rudy

Trad. F. G. Corugedo. Anagrama. Barcelona, 2005. 210 págs., 14’50 euros

Hanif Kureishi es uno de los "autores poscoloniales británicos" más conocidos en España. El buda de los suburbios, galardonada con el Whitbread, es quizás su mayor logro, aunque me interesa más El regalo de Gabriel y sobre todo los relatos de Amor en tiempos tristes.

Esta última entrega, Mi oído en su corazón, responde a la constante biográfica que caracteriza su narrativa. La novedad tiene que ver con el protagonismo que alcanza Shanoo Kureishi, padre del autor. Ahora las vivencias personales del hijo y su preocupación por reflejar el espíritu e idiosincrasia de su tiempo se ve enriquecida por la inclusión de la figura paterna. El padre, que comienza siendo el motor de la acción, terminará por convertirse tanto en sustancia argumental como en paradigmático ejemplo de postulados literarios que interesan directamente teorías relacionadas con la metaficción. Mi oído en su corazón es una novela, pero desde los primeros compases queda claro que puede ser entendida al mismo tiempo como un estudio biográfico -"Para él [su padre] escribir y leer sobre su país era suficiente. ésa era la distancia que le gustaba; en vez de vivir, empezó a escribir sobre los que leían" (pág. 57)-; como una narración autobiográfica; un ensayo literario y un interesante documento de tintes psicoanalíticos -"Creo que estoy escribiendo este libro de la manera que él [su padre] escribió el suyo, como una especie de collage, con la esperanza de que las cosas aguanten, por divididas y fragmentadas que puedan estar, como cualquier mente" (págs. 25-26). Es el argumento quien propicia tal variedad de posibilidades interpretativas.

El hilo conductor tiene que ver con el propio Hanif Kureishi -ahora personaje de Mi oído en su corazón-, quien tiene en su poder el manuscrito de una inconclusa novela escrita por su padre, titulada Una adolescencia india. No es el único escrito del padre, novelista vocacional, pero sus creaciones nunca despertaron el interés de los editores y sólo llegó a publicar unos pocos artículos periodísticos. El manuscrito que tiene Hanif en su poder es un escrito de corte autobiográfico en el que relata cómo fue su infancia en la India británica, el posterior éxodo a Pakistán al tratarse de una familia musulmana y su vida en Gran Bretaña trabajando como funcionario de la embajada de Pakistán. Los miedos, reflexiones y descubrimientos que provoca la lectura conformarán el argumento. Esta sinopsis apenas si refleja la riqueza que encierra esta historia donde las relaciones familiares entre padres-hijos, hermano-hermano (el padre de Hanif tiene un hermano también escritor, pero exitoso), esposos, incluso abuelos-nietos alcanzan una complejidad que trasciende la aparente rutina con que Kureishi narra los acontecimientos.

El capítulo 12 resulta especialmente interesante por las connotaciones crítico-literarias que encierra. Kureishi parece convertirse en una suerte de profesor de literatura para teorizar sobre la propia obra que estamos leyendo. Indudablemente un singular retruécano narrativo.