La buena nueva es la siguiente: Apple se lleva el gato al agua consiguiendo lo impensable, que la empresa llamada The Beatles, esa mina inagotable desde los años sesenta, ceda los férreos derechos de distribución de las canciones del cuarteto de Liverpool a una tienda digital, iTunes.

¿Nos cambia la vida? No si uno lleva años escuchando a los Beatles en Internet. Y sí si uno es legal y hoy es de los que compra música a través de la Red. Si es del segundo tipo, esta es su noticia: además de gastar los euros en cedés, cajas, deuvedés, etcétera renovados, remasterizados, reunidos cada Navidad, ahora podrá adquirir las canciones del grupo al precio de 0,95 euros y cada uno de sus álbumes -los 17 que hicieron- a 9,63 euros. Y ya podemos decir que los Beatles han puesto la otra pierna en la era digital, pues la primera ya la pusieron a finales de los ochenta cuando, más bien tarde y a rebufo del resto del mundo, aceptaron convertir sus grabaciones a discos compactos.

Por otra parte, y en lo que compete al mundo de la industria musical, ¿qué significa esta compra que ha durado meses? Pues lo que ya sabíamos, que Apple, tras una etapa de desconcierto, le ha vuelto a sacar ventaja a sus competidoras, Amazon y Spotify, por no hablar del resto de empresas discográficas que también abarcan la distribución. Y, dicho sea de paso, lograr con la exclusiva una campaña publicitaria (este artículo incluido) que, de nuevo, no le costará ni un duro.