El Real Madrid no tuvo su mejor noche ante el Valencia en Mestalla. El conjunto blanco vio como dos goles en los primeros diez minutos de partido le ponían el partido muy cuesta arriba. Especialmente mala fue la actuación de los defensas, que no pudieron frenar los ataques valencianistas.
Especialmente malo fue el partido de Varane. El francés, siempre a un buen nivel, estuvo irreconocible ante los valencianistas. El galo tuvo su peor noche desde que fichó por el Real Madrid, fallando en el segundo gol y con contantes errores que pudieron suponer algún tanto más en contra. Pero el ex del Lens no fue el único.
Sergio Ramos volvía al equipo tras perderse por unas molestias el partido frente al Espanyol y su nivel distó mucho del de sus mejores actuaciones. El camero pudo cometer un penalti sobre Munir que pudo costar un disgusto más a su equipo.
En los laterales no fue mucho mejor. Tanto Marcelo como Carvajal vieron como por sus bandas llegaba constantes ataques ches. Nani, Munir u Orellana encontraron dos autopistas por las bandas. Además, en ataque tampoco aportaron tanto al equipo como acostumbran.
Para colmo, Casemiro y, sobre todo, Keylor Navas, tampoco tuvieron su día, a pesar de tener alguna buena intervención. Ninguno de los dos mostraron su mejor cara y no ayudaron a la defensa contra los ataques de los de Voro. Sin duda alguna, fue una noche para olvidar de toda la defensa merengue.