La temporada de Pepe ha sido una montaña rusa futbolística. El central siempre ha sido una pieza clave en el esquema blanco, sin embargo, el malestar con su renovación enturbió la relación del jugador con el club, con el entrenador, con la afición y consigo mismo. 

La ausencia de un acuerdo para ampliar su contrato llevó a muchas especulaciones sobre su futuro que no hicieron más que mermar su rendimiento. Adelantado en la titularidad por Varane, no parecía tener fuerzas para tratar de reivindicar su puesto. Además, con varias lesiones ocupando su día a día, el portugués no acababa de entrar en la buena dinámica que acostumbra. 

Por si fuera poco, todo apuntaba a que tenía un pie y medio fuera de la entidad blanca, siendo nada más y nada menos que China su destino, al que luego se sumaron ciertos clubes de la Premier. Con la cabeza en otro lado y enfadado con el club blanco, la concentración de Pepe en el fútbol se ponía continuamente en duda. 

PARÓN DE SELECCIONES

Además, llegó el parón por selecciones y, tras no haber entrado en varias convocatorias por molestias, se marchó con Portugal para jugar todos los minutos con el combinado nacional. Algo que no gustó en Madrid, donde se le llegó a acusar de borrarse y de despreocuparse de un conjunto que se dolía por la ausencia de Varane con una lesión muscular. Además, a la afición no le terminó de agradar ver cómo el francés apechugaba y se quedaba trabajando en Valdebebas y Pepe no hacía lo mismo y acudía con ansia a la llamada de Fernando Santos

GLORIA

Sin embargo, le sentó bien el viaje y volvió con las pilas cargadas para ser fundamental en el tramo final de la temporada. Un momento que se complicaba para Zidane con la recaída de Varane en sus molestias musculares y la cual abría paso al portugués para la titularidad en el mes más complicado con los títulos en juego. El primer paso era el derbi. El momento de Pepe asomaba en el Bernabéu en la tarde del sábado, y tanto que lo fue. Titularidad y gol. Una actuación que levantó al público del estadio que se reconcilió al cien por cien con un jugador que siempre ha defendido con orgullo el escudo madridista. 

LESIÓN

Todo parecía ser perfecto para Pepe en el derbi cuando, en una acción fortuita con Toni Kroos, el alemán le propinó un rodillazo en las costillas tras el cual no pudo continuar. Lo intentó, a sabiendas de que el encuentro se ponía cuesta arriba, pero no pudo. Nacho se encargó de sustituirle y, en el cambio, el Bernabéu entero se puso en pie, regalándole una ovación de las que no muchos disfrutan y que le debió recordar que sí es un jugador querido en la casa blanca. 

Las malas noticias se confirmaban después, cuando las pruebas revelaban la fractura de dos de sus costillas que le tendrán apartado de los terrenos de juego mínimo un mes. Una lesión complicada que llega en el peor momento, cuando empezaba a repuntar y tenía todo a favor para acompañar a Sergio Ramos en el centro de la zaga en lo que resta de temporada. Un nuevo altibajo que tendrá que superar pues, si esta es la última campaña que viste la camiseta blanca, es seguro que querrá terminarla en lo más alto de la montaña. 

Juanfe: "Pepe está desilusionado con el Real Madrid" by footbie.com

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