El Barcelona ha anunciado este jueves que tomará medidas contra las palabras de Al-Thani. El presidente del Málaga atacó duramente tras las insinuaciones de que su equipo se iba a dejar ganar contra el Madrid en la última jornada de Liga solo por el hecho de que Míchel tuviese pasado madridista. El jeque utilizó las redes sociales para mandar un mensaje que ha dolido mucho en el Camp Nou: "Con la ayuda de Dios les ganaremos en el campo. Pero la escoria de Cataluña no va a sentir el olor de la Liga después de sus mentiras sobre Míchel".
El conjunto azulgrana ha querido destacar que esas palabras "atentan contra los principios del fair play, de la ética y de la legalidad que deben regir la competición deportiva" y por ello ha decidido denunciar el caso ante el Comité de Antiviolencia y también trasladará el asunto al Comité de Competición y al Departamento de Integridad de La Liga. Resulta curioso que el Barcelona haya actuado así en esta situación y haya pasado por alto todo los ataques que Joan Gaspart ha hecho contra el Real Madrid.
El que fuese máximo dirigente del Barcelona es ahora vicepresidente de la RFEF. En un cargo así se presupone imparcialidad, algo que Gaspart ha demostrado no tener cada vez que habla del Madrid y que desde el Camp Nou se han encargado de definir como libertad de expresión. Resulta curioso cómo hicieron caso omiso en todas y cada una de las ocasiones que su expresidente atacó al club blanco, del que ha soltado perlas como: "Perjudicaré deportivamente al Real Madrid hasta que me muera"; "soy culé y antimadridista. Lo que haga el Madrid me la sopla. Ni equipo español ni mierdas" e incluso deseó lo peor a Zidane cuando se hizo cargo del banquillo del Madrid: "soy forofo culé y antimadridista. A Zidane le deseo lo peor como entrenador".